Ni los ingresos millonarios de las estrellas de Hollywood son suficientes para esquivar la crisis mundial. Aunque su situación no es comparable a la de un ciudadano de a pie, los famosos también sufren problemas económicos, sobre todo, para aquellos que han decidido poner en venta sus casas y años después no encuentran comprador. Sharon Stone no puede mantener su mansión de Los Angeles. Ante la falta de compradores, la actriz se ha decidido a alquilarla por 18.000 euros mensuales. Quien tampoco es capaz de vender es Leonardo Dicaprio. En su caso, la mansión está frente al océano en Malibú y en su día costó 3.200.000 euros. El protagonista de "Titanic" se ha ido a vivir con la modelo Bar Rafaeli, por lo que sacó su residencia al mercado por algo más de 4 millones y medio, un precio que bajó hasta los 3.800.000. Nicolas Cage si ha podido vender un castillo situado al sur de Inglaterra, por el que se encaprichó. Lo adquirió en 2006 y después se dio cuenta de que en la reforma se había gastado millones de euros y en todos estos años apenas había ido una vez.