Barcelona/Valladolid.- El ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, aseguró ayer en Barcelona que no le consta que la reforma de la ley del aborto «esté en la agenda política» y añadió que la prioridad del Gobierno es «garantizar en todo momento» que la interrupción voluntaria del embarazo «se preste en las mejores condiciones posibles y con la máxima seguridad para las ciudadanas».

En referencia a los casos de abortos ilegales, aseguró que se trata de «presuntos casos de incumplimiento de la ley» y señaló que «la justicia tiene que seguir su camino». Soria mostró su «sorpresa» de que «algo que viene pasando en España desde hace 20 años salga con esta virulencia a dos meses de las elecciones». Aseguró que en todo momento, tanto el Gobierno central como la Generalitat, han «preservado la salvaguarda» de este servicio. Explicó que datos sobre abortos apuntan que existe «un aumento progresivo ligado a un aumento de la población».

Por su parte, el coordinador general de Izquierda Unida y candidato a la Presidencia del Gobierno, Gaspar Llamazares, emplazó ayer al PSOE a promover una ley de plazos con garantías plenas en las primeras 14 semanas de gestación para el ejercicio del derecho al aborto sin ningún tipo de restricciones, una propuesta que, según adelantó, defenderá IU en su programa electoral ante los próximos comicios del 9 de marzo.

«Caza de brujas»

Así se pronunció ayer Gaspar Llamazares ante la "caza de brujas" que, a su juicio, han puesto en marcha los sectores ultraconservadores del país en contra de las prácticas abortivas que se practican en las clínicas de España y en contra del derecho a la libre maternidad de las mujeres.

Por último, el centro Jurídico Tomás Moro acusó ayer a la Clínica Isadora de albergar en sus contenedores los restos de más de cien fetos mezclados con información confidencial sobre las pacientes, además de instrumentación para la práctica de abortos tardíos.