Así lo señala el diario británico "The Independent", que se hace eco de un estudio a nivel europeo según el cual el empaste de una muela infantil cuesta 156 euros en Gran Bretaña frente a 135 euros en Italia y 125, en España, el tercer país más caro.

Por el contrario, esa misma operación cuesta 67 euros en Alemania, 64 en Holanda, 47 en Dinamarca, 46 en Francia y sólo 18 euros en Polonia y 8 en Hungría, el país más barato de todos y el destino más popular actualmente del turismo dental.

Según los autores del estudio, llevado a cabo por el Institute for Medical Technology Assessment, de la Universidad Erasmus, de Rotterdam (Holanda), el factor que más contribuye al precio de ese tipo de servicios en todos los países - hasta un 70 por ciento del total en el Reino Unido- es el costo de la fuerza de trabajo.

En Gran Bretaña, los costos laborales son de 2.88 euros el minuto frente a 0.09 euros en Hungría.

La Asociación Dental Británica rechaza los resultados del estudio, publicado en la revista "Health Economics", y señala que no era representativo, entre otras cosas porque tiene en cuenta sólo un número limitado de operaciones.

Según el profesor Reinhard Busse, de la Universidad de Tecnología de Berlín, que encabezó el equipo investigador, el objetivo del informe es "ayudar a los gobiernos a planear los niveles de reembolso que serán necesarios si aumenta, como es de esperar, el turismo médico transfronterizo".

La Comisión Europea ha propuesto abrir las fronteras de los 27 países que la integran a los pacientes de cualquiera de ellos que busque tratamiento médico en otro, lo que obligaría al sistema sanitario del país de origen a pagar la factura, al menos en algunos casos.