John Wayne Bobbitt, que saltó a la fama en 1993 cuando su esposa, Lorena, le cortó el pene, quedó absuelto ayer en un tribunal de Las Vegas del cargo de golpear a su actual mujer, que es la tercera en su historial.

El juez determinó que Joanna Ferrell no había resultado herida en una pelea el pasado septiembre con su marido, de quien se encuentra en trámites de divorcio.

Bobbitt, de 38 años, reconoció tras la sentencia sus problemas domésticos y declaró que «siempre he tenido un problema de juicio, especialmente cuando se trata de mujeres». En febrero de 2003 ya había sido declarado culpable de maltratar a Ferrell, lo que motivó que se le retirara la libertad condicional que se le había otorgado tras su participación en un robo en una tienda en 1999. En 1993, Lorena Bobbitt fue declarada inocente de su acción tras alegar locura motivada por los maltratos a que su marido le sometía.