Las cofradías de Zamora, al rescate de la Junta pro Semana Santa

La entidad que preside Isabel García tiene problemas de liquidez hasta que cobre las subvenciones

Consejo Rector de la Junta pro Semana Santa de Zamora, presidido por Isabel García Prieto

Consejo Rector de la Junta pro Semana Santa de Zamora, presidido por Isabel García Prieto / JOSE LUIS FERNANDEZ

Carlos Gil Andrés

Carlos Gil Andrés

La mayor parte de las cofradías de la Semana Santa de Zamora han salido al rescate de la Junta pro Semana Santa mediante la concesión de un préstamo que permita al órgano central de la Pasión poder funcionar de manera ordinaria, hasta tanto en cuanto no empiecen a llegar los ingresos de las subvenciones concedidas por las diferentes administraciones.

Fue uno de los acuerdos principales del Consejo Rector celebrado esta misma semana en la sala de reuniones del Seminario, donde se celebran los encuentros en órgano ejecutivo de la Semana Santa de Zamora hasta tanto no estén habilitados nuevos locales en el Museo.

En concreto, la Junta pro Semana Santa ha tenido que hacer frente a numerosos gastos sobre todo relacionados con la Pasión de 2023, como han sido los del montaje de la carpa, la seguridad, o los arreglos de los daños en las mesas provocados por la inundación de la Panera, que ha adelantado la Junta pro Semana Santa, a la espera del cobro por parte de los seguros, pese a que estos han adelantado ya una cantidad a cuenta.

Por otra parte la Junta pro Semana Santa tiene 137.545 euros de subvenciones pendientes de cobro. Está seguro su ingreso, aunque no el periodo en el que éste se materializará, que puede ser, además, diferente, según el tipo de subvención y la administración que la ha concedido.

Esta es la causa por la cual la Junta de Semana Santa tiene un problema puntual de liquidez. Para solucionarlo el Consejo Rector estudió dos fórmulas. Una de ellas, acudir a una operación crediticia, en concreto con Caja Rural, que ofrecía unas condiciones muy ventajosas para la Junta pro Semana Santa, pignorando las subvenciones pendientes de cobro.

La segunda opción era que las cofradías prestaran el dinero a la Junta pro Semana Santa, según sus posibilidades para que ésta se lo fuera devolviendo a medida que se vayan cobrando las subvenciones, siguiendo el mismo criterio, es decir, en función de las necesidades que puedan tener las hermandades. Tras un estudio de esta propuesta y sondeando las posibilidades de aportación de cada cofradía, el Consejo Rector optó por esta segunda opción, con la que se asegura el ingreso prácticamente inmediato de en torno a 80.000 euros, más que suficientes para cubrir las necesidades de liquidez.

La mayoría aporta

No todas las cofradías pondrán dinero, pero si la gran mayoría, una fórmula que, por otra parte, no es nueva, ya que se ha utilizado en alguna otra ocasión. Se trata de préstamos a interés cero, pero que tienen el reintegro asegurado, ya que las subvenciones pendientes cubren de sobra las cantidades adelantadas.

Fue el asunto de más enjundia de un Consejo Rector que tuvo conocimiento de la situación en la que se encuentra la obra del Museo de Semana Santa, paralizada de facto por la empresa, pero sin autorización oficial y a la espera, por tanto, de que los contactos entre la Administración y el contratista permitan continuar los trabajos sin mayor demora para el plazo final del proyecto.

También conocieron los presidentes o representantes de las cofradías el informe de Patrimonio sobre la atarjea que ha aparecido en el solar del Museo, que básicamente hay que condenar para desviar por otro lado las aguas residuales, desmontar por tramos, dejar un testimonio de cómo es y marcar de alguna forma en el suelo del sótano la trazada exacta de por dónde va. Es algo parecido a lo que se hizo con el pavimento de Santa Clara, donde se ha marcado el lugar que ocupaba la puerta de la Muralla.