La Hermandad Penitencial de las Siete Palabras, creada en 1968, año revolucionario por excelencia, y primera que incorporó a las mujeres en los desfiles con la cara tapada, otra auténtica revolución en la Zamora de la época, acaba de presentar el libro del 50 aniversario, que se cumplió en 2017, aunque no ha podido ver la luz hasta que la pandemia del COVID no ha finalizado.
En el salón de actos del Museo de Semana Santa el actual abad, Roberto Ariza Chiches, acompañado por Virginia Rodríguez Carrascal, ha comparecido junto al autor del libro, Florián Ferrero y buena parte de los presidentes de la hermandad, desde el creador de la idea fundacional y primer dirigente Juan Manuel Nieto Nafría a Manuel Rodríguez, que estuvo 24 años de dirigente, Fernando Primo o José Tomás. Faltaban algunos, como Javier Mendiri, a quien los presentes reconocieron como el presidente que puso en marcha la obra social.
Todos ellos tuvieron ocasión de relatar sus vivencias, especialmente en los duros primeros momentos, cuando la hermandad recibe todos los parabienes del Obispado y de la Junta pro Semana Santa, pero se encuentra con un muro cuando declara sus intenciones de que las mujeres participen también, con caperuz, en el desfile.
Fernando Primo, José Luis Tornero, Luis Hernández, Félix Frades y Ramón Cifuentes formaron el grupo fundador, aunque éste último se desvinculó posteriormente y entraron María Dolores Galache y María del Carmen Hidalgo.
No fue hasta 1988 cuando la hermandad logró que salieran mujeres, tras una ardua lucha en la que el abad, Manuel Rodríguez, logró el asesoramiento de monseñor José Delicado Baeza y el especialista en Derecho Canónico Julio Manzanares, que lograron hacer entrar en razón al Obispado de Zamora, que prohibía salir mujeres en la Siete Palabras al mismo tiempo que lo permitía en las Damas de la Soledad de Jesús Nazareno o la Cofradía de San Ildefonso.
Recordó Primo los insultos, de "ladrones" o "señoritos" que recibieron los dirigentes de las Siete Palabras cuando por fin desfilaron las mujeres y las coplas que se cantaron en su contra.
La cruz del 50 aniversario realizada por José Antonio Pérez, que presidió la presentación del libro, simboliza estos momentos claves para la hermandad, como el año de fundación, la salida en procesión de las mujeres o el escudo de la cofradía que también hubo de ser modificado para eliminar el libro que figuraba en el original.
