Los alumnos de la guardería de Toro se contagiaron ayer del espíritu propio de la Semana Santa y participaron en un desfile procesional por el patio del centro. Agrupados por niveles, los pequeños accedieron al patio ataviados con las túnicas características de la cofradía de Jesús Nazareno y Ánimas de la Campanilla y de la Asociación del Santo Sepulcro y la Soledad, mientras que un grupo de niñas lució peineta y mantilla como las asociadas de la Virgen de los Dolores. Padres y familiares se apostaron detrás de una verja del patio para seguir el desfile que fue amenizado por músicos de La Lira y en el que un grupo de niños portaron el paso de un crucificado adornado con flores rojas.