La Hermandad del Santísimo Cristo del Espíritu Santo será la primera de las seis procesiones que verá alterado su recorrido al no poder pasar por el tramo de Rúa de los Notarios afectado por el edificio en ruinas, lo que ha obligado a encontrar un recorrido alternativo que no dañará la estética de a hermandad al desarrollarse por calles estrechas y empedradas. La Hermandad está hoy más pendiente del tiempo meteorológico con unas previsiones que indican muchas posibilidades de lluvia, pero los responsables esperarán hasta la tarde de hoy para conocer si se cumplen y si ello obliga a otras modificaciones.

Si no hay novedad, a las 22.30 y tras el tañer de las campanas de la iglesia del arrabal, el pendón de la hermandad marcará el camino que todos los hermanos seguirán hasta llegar a la Catedral para el acto central de la procesión.

La austera hermandad del barrio del arrabal realizará su caminar hasta El Salvador repitiendo el itinerario del pasado año, con la novedad del paso por la calle Arcipreste en lugar de por la Rúa del Silencio, dejando algunas de las imágenes más icónicas de la Pasión zamorana a su paso por la Cuesta del Mercadillo, la travesía del Troncoso o la propia calle Arcipreste y su paso por la plaza de Fray Diego de Deza.

Será en la vuelta de la hermandad hasta el barrio del Espíritu Santo cuando los hermanos tengan que modificar su recorrido y en lugar de volver por la Rúa de los Notarios, lo harán por plaza de Antonio del Águila, Obispo Manso, Plaza de Arias Gonzalo, Rúa del Silencio y Cuesta del Mercadillo, manteniendo, desde ahí, el recorrido habitual hasta la iglesia del Espíritu Santo.

Precisamente esta iglesia acogió ayer el rezo de vísperas y el solemne besapié al que se acercaron numerosos fieles. Durante la jornada de hoy el templo estará abierto para que todos los cofrades y devotos puedan rezar delante de la imagen del Santísimo Cristo, incluso disfrutar del último ensayo del "Christus factus est" antes de la procesión y de que los hermanos se congreguen en el huerto de la iglesia del bario del Espíritu Santo para orar juntos antes de salir en procesión. Será, el canto de la obra de Miguel Manzano en el atrio de la Catedral, uno de los momentos álgidos de la procesión aunque el coro de la hermandad romperá el silencio imperante durante el desfile con otras obras de enorme calado en la ciudad como el "Crux Fidelix". Antes de interpretar la obra coral en el atrio de la Catedral, se proclamará la Pasión del Señor.

Junto al crucificado gótico de la hermandad, que este año estrena iluminación led, desfilan el incensario y el campanil marcando los primeros sonidos y olores de la semana de Pasión zamorana. Incienso y tañer de campanas por un Cristo en la cruz.