La Asamblea de Juntas de la Semana Santa de Castilla y León, a la que pertenece el órgano de cofradías de Zamora, se ha levantado en armas contra la Junta de Castilla y León por su idea de establecer las vacaciones escolares de 2018 entre el Miércoles Santo y el Lunes de Aguas. Una decisión que, apuntan, perjudicaría seriamente las celebraciones al "menguar" las procesiones y "desfavorecer" las inyecciones económicas a las diferentes ciudades de la región. El órgano regional de cofradías, ante esta situación, ha enviado hasta tres misivas a la Junta de Castilla y León con Juan Vicente Herrera, María Josefa García Cirac y Fernando Rey como destinatarios. Una medida de presión con la que, esperan, se pueda llegar a un acuerdo para que las vacaciones escolares se produzcan entre el Viernes de Dolores y el Lunes de Pascua.

Las pretensiones de las diferentes juntas de Semana Santa de la región no son otras que cambiar el modelo de vacaciones establecido para el curso de 2018. "Después de tres años seguidos en que las vacaciones de Semana Santa han coincidido con las fechas en las que se celebran los misterios de la Pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor en las que la participación de cofrades y visitantes ha ido incrementándose, nos encontramos este año con la desagradable sorpresa de que en el año 2018 las vacaciones escolares comenzarán el Jueves Santo y se extenderán una semana después de terminarse la Semana Santa", denuncian desde la asociación.

Por ello, los representantes de las diferentes Pasiones de Castilla y León han rubricado tres misivas dirigidas al presidente de la Junta, a la consejera de Cultura y a su homónimo de Educación, al objeto de evitar este nuevo calendario. La petición ha sido apoyada por las juntas de cofradías de Ávila, Valladolid, Segovia, León, La Bañeza, Nava del Rey, Medina del Campo, Benavente, Ponferrada, Tordesillas, Zamora, aunque aseguran desde la Asamblea que cuentan con el apoyo de las de Salamanca, Astorga, Peñafiel, Palencia, La Granja de San Ildefonso, Toro y Burgos, "que no pudieron acudir a la reunión" celebrada en Medina del Campo.

Las cofradías esperan ahora que la Junta ofrezca una respuesta a este requerimiento después de "cinco años reclamando este modelo de vacaciones sin conseguir que den una contestación".