La madrugada del Viernes Santo es uno de los momentos más esperados de la Semana Santa zamorana, y de ello dieron fe los miles de zamoranos y turistas que ayer se acercaron a la iglesia de San Juan, donde ambos pasos esperaban pacientemente hasta las cinco de la mañana.
El templo abrió sus puertas durante mañana y tarde para dar cabida a los curiosos y brindar a los asistentes una vista que dificilmente puede conseguirse durante la procesión. Fieles y turistas pudieron aprovechar para presencar las dos tallas más conocidas de la procesión de Jesús Nazareno desde cerca, desde muy cerca. Fueron muchos los que aprovecharon el momento para sacar una instantánea de las imágenes dentro del templo desde el que han partido esta madrugada.
De otro lado, el tradicional baile del Cinco de Copas dentro de la iglesia de San Juan pudo presenciarse a través de una pantalla de grandes dimensiones instalada en un lateral del templo. El "baile" fue un año más el punto de partida de la Procesión de Jesús Nazareno, popularmente conocida como la de Las Cinco de la Mañana, que congrega a miles de personas por las calles de la capital zamorana.
En la procesión desfilaron diez pasos, entre los que también se encuentran "La Caída", del imaginero zamorano Ramón Alvarez, del año 1866; "Las tres marías y San Juan"; "Jesús Nazareno" de Antonio Pedrero, "Verónica", "Desnudez", "Crucifixión", "La Elevación de la Cruz", de Aurelio de la Iglesia Blanco, de 1900, y "La Agonía".
