La Hermandad de Jesús en su Tercera Caída abre hoy los actos procesionales del Lunes Santo en Zamora con un recorrido que parte de la iglesia parroquial de San Lázaro a las 20.30 horas. Después de recorrer las calles de la capital, la procesión finaliza en el Museo de Última. El paso es del escultor bilbaíno Quintín de Torre y Berasategui y representa a un Jesús caído que apoya su brazo izquierdo en el suelo, mientras que con el derecho trata de soportar a duras pena el peso de la cruz.

En esta procesión, escoltan al paso principal otras dos tallas. Por delante y abriendo el desfile procesional, la Despedida de Jesús y María, esculpida por Enrique Aniano Pérez Comendador y cerrando la Virgen de la Amargura, obra del escultor zamorano Ramón Abrantes. Una de las atracciones principales de la procesión de la Hermandad de Jesús en su Tercera Caída son las cruces que se muestran al inicio del desfile, obra de José Luis Coomonte. Entre todas, destaca una de yugos y una corona de espinas hecha con arados. Después del recorrido por las calles de la ciudad, se realiza una oración en la Plaza Mayor en el que se homenajea a los difuntos. Los acordes del Mater Mea y La Muerte no es el final se entonan en este solemne acto, antes de regresar al museo.

La Hermandad de Jesús en su Tercera Caída fue fundada el 17 de abril de 1942 y desfiló por primera vez el 8 de abril de 1943. Los cofrades llevan túnica y caperuz de raso negro y una capa de raso blanco y portan un hachón rematado en farol con vela.