Alberto Guillén es el responsable de Productos Digitales de BBVA en España y participará este próximo jueves día 28 de octubre en el webinar “Salud financiera, qué es y cómo gestionarla”, que han organizado LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA Y BBVA. Junto a él, estarán presentes en el encuentro Manuel Mostaza, sociólogo, politólogo y responsable del Departamento de Asuntos Públicos de Atrevia; y Esther del Brío, catedrática de Economía Financiera de la Universidad de Salamanca.

–¿En qué consiste el concepto de salud financiera que protagoniza este webinar que celebrará el diario?

–En BBVA, denominamos salud financiera a la gestión que cada uno de nosotros hace de su economía doméstica. Es un concepto que no sólo incluye el control de los gastos e ingresos en el día a día, sino que también engloba el ahorro para poder enfrentarse a imprevistos, así como el control de nuestra deuda o también la planificación financiera de cada uno de nosotros para acometer proyectos a futuro. Podríamos resumir que salud financiera es la gestión de la economía, tanto a corto como a largo plazo, que nos permite obtener tranquilidad para afrontar nuestro futuro.

–¿La salud financiera se puede medir?

–Cada economía es distinta y cada uno de nosotros tiene prioridades diferentes, por lo que no podemos afirmar que la salud financiera se pueda medir o que exista una regla general para saber si nuestras finanzas son o no saludables. Lo que sí podemos afirmar es que la situación idónea para una familia debería ser que sus gastos recurrentes no supongan más del 35% de todos sus ingresos. Otro patrón de ahorro, muy común también, es la denominada regla 50/30/20. Esto significa que el 50% de los ingresos mensuales se destinan a los gastos habituales o recurrentes, como puede ser los relacionados con el hogar o la hipoteca, el 30% a gastos más prescindibles –ocio, ropa, etc.– y el otro 20% destinarlos íntegramente al ahorro. Pero como me gusta decir, lo importante es crear una pauta de ahorro, que seamos conscientes de que es importante hacerlo y lo hagamos en la medida de nuestras posibilidades.

–¿Por qué ha apostado BBVA en este momento por ofrecer este servicio a sus clientes?

–En BBVA llevamos trabajando el concepto de salud financiera desde hace años. Para nosotros, y sobre todo para nuestros clientes, la planificación financiera no es algo nuevo, ya que disponemos de diferentes funcionalidades en nuestra ‘app’ que ayudan al cliente a gestionar sus ahorros, ingresos y gastos. Pero en esta ocasión, hemos querido ir más allá y dar un impulso a este servicio para brindar a nuestros clientes una experiencia mucho más completa; una experiencia más personalizada, proactiva e intuitiva. El servicio ofrece al cliente información sobre sus gastos recurrentes, –suministros y suscripciones–, le brinda además una estimación de cuánto ahorro puede suponer la cancelación de estos gastos recurrentes o también sugerencias proactivas para ayudarles a gestionar mejor su situación económica. Todas estas posibilidades se unen a herramientas que ya tenían los clientes a su disposición como puede ser el redondeo de compras con tarjetas, crearse presupuestos o metas de ahorro, entre otras. Ayudar a los clientes en la gestión de su salud financiera es una de las seis prioridades estratégicas de BBVA.

–¿Qué ventajas tiene para el usuario conocer al detalle el estado de sus cuentas?

–Consideramos que las ventajas son varias, pero si quisiéramos resumirlas brevemente diríamos que el servicio aporta muchísima tranquilidad y confianza al cliente. Todos sabemos que el dinero puede ser una causa de estrés, y una buena gestión de la economía puede evitar o reducir ese tipo de preocupaciones. Pero no podemos olvidar que la gestión es una disciplina y por ello hay que hacerlo de forma constante y teniendo claro nuestros objetivos y qué queremos conseguir con ello. Es importante ahorrar, en la medida de las posibilidades de cada uno, por ejemplo, reduciendo gastos innecesarios o con la creación de metas y reglas de ahorro. Estas sencillas pautas nos permitirán tener un colchón frente a imprevistos. Tener una visión a largo plazo de nuestra economía también nos permite afrontar el futuro con más tranquilidad. Para ello, desde BBVA, ofrecemos algunas herramientas que facilitan la gestión de la deuda e información sobre el patrimonio neto.

–¿Resulta inconveniente no llevar ese control financiero personal?

–En general, para tener una buena salud financiera es imprescindible tener un mínimo control sobre tus finanzas. Ahora bien, la forma en la que cada uno de nosotros lo gestionamos o nos enfrentamos a la toma de decisiones que afectan a nuestra economía es muy personal. Por ejemplo, hay personas que son muy controladores con sus gastos y su forma de ahorrar y otros no tanto. En cualquiera de los casos, es necesario hacer un seguimiento de tus finanzas y cuánto más fácil te lo pongan mejor. Y, en parte, eso es lo que también buscamos, hacerlo tan fácil que hasta una persona que tiene cierta aversión a seguir sus gastos o a empezar a ahorrar se plantee hacerlo sin esfuerzo. Un ejemplo que vemos que funciona muy bien entre nuestros clientes es la regla de ‘redondeo de compras con tarjeta’. Esta herramienta permite al usuario ahorrar sin darse cuenta con cada compra que haga. Por poner un ejemplo, si te tomas un café por 2,5 euros la herramienta redondeará a 3 euros y la diferencia la apartará a una cuenta de ahorro.

–¿Este servicio de salud financiera de BBVA es una fotografía fija de las cuentas de cada persona o existe un “feedback” para mejorar la gestión de esa economía personal?

–Con el nuevo servicio, buscamos ayudarles primero a entender bien su economía, sus finanzas y su salud financiera y en segundo lugar ayudarles a mejorar. Para ello no nos basamos en una foto fija sino en cómo ha evolucionado su situación en el pasado y cómo creemos que podría evolucionar a futuro. Lo primero que te damos es una visión global de tu economía que antes no era posible. Esta visión está compuesta por una parte de la del día a día, tus ingresos y gastos, y por otra parte del patrimonio, es decir, lo que tienes menos lo que debes o tienes financiado, con el fin de ayudar a nuestros clientes a tomar decisiones a medio/largo plazo y empezar a planificarse. Esta nueva visión es una de las principales novedades donde los clientes podrán conocer su patrimonio neto, tener todo el detalle de todo lo que tiene en cuentas, seguir la evolución del ahorro e inversión o empezar a invertir, conocer el valor de su vivienda y sus gastos asociados o entender mejor su financiación y su capacidad de endeudamiento para gestionar mejor su deuda. Además, una de las novedades del nuevo servicio es que como decís buscamos darle ese “feedback” al cliente con una experiencia mucho más proactiva y personalizada que antes. A través de mensajes contextuales en la app, anticipamos movimientos relevantes que pueden tener impacto en su economía y, además, sugiere planes de acción para ayudarte a ahorrar y así mejorar tu salud financiera.