Las enfermedades cardiovasculares son la mayor causa de mortalidad mundial y en España no es diferente, registrando, además, una de las tasas más elevadas. Con la pandemia, se ha acentuado la preocupación de los zamoranos por su salud y estas enfermedades son una de las que más inquietud generan en la ciudadanía.
Este recelo ha provocado un incremento del número de visitas a las consultas de los nutricionistas y un aumento del ejercicio diario que realizan los ciudadanos. Claudia Zurdo, dietista y nutricionista de la ciudad, identifica un cambio en los motivos de consulta “antes de la pandemia era más habitual que los pacientes acudieran a consulta por un tema de su aspecto físico, porque querían adelgazar. Sin embargo, tras la crisis sanitaria, ha pasado a ser más por una preocupación por su salud”. Entre los perfiles más habituales “están las personas que sufren hipertensión, colesterol, triglicéridos altos o alguna enfermedad cardiovascular”.
Hábitos saludables
Alrededor del sesenta por ciento de los españoles tiene dos o más factores de riesgo cardiovascular y “se nota que hay una mayor concienciación con la situación, aunque continúa habiendo una gran falta de desconocimiento sobre algunas cuestiones”. Entre estas, Zurdo apunta a falsos mitos “como la creencia de que la ingesta de vino tinto favorece el funcionamiento del sistema cardiovascular”.
Otra de las variaciones observadas por la nutricionista es el cambio en las peticiones que recibe en su consulta. “Antes la gente acudía pidiendo dietas con las que adelgazar, ahora llegan muchas personas que quieren aprender a comer, adquirir hábitos alimenticios saludables”. Algo que relaciona con las redes sociales, en las que cada vez hay más contenidos sobre nutrición y estilos de vida saludable, “lo que indudablemente es positivo para todos”.
El aumento de peso no necesariamente lleva a la enfermedad cardiovascular, pero la obesidad si puede acarrear un síndrome metabólico
Asimismo, “inculcar estos hábitos desde la infancia es imprescindible para que, tanto los niños, como los futuros adultos, lleven una alimentación equlibrada”. Según el informe de Allurion, los españoles están entre los mayores consumidores de fruta. Sin embargo, Zurdo apunta que “si bien los pacientes de mi consulta comen frutas y verduras, su consumo es menor al recomendado, comiendo una sola pieza cuando deberían ser al menos tres. Esto es más habitual en la población infantil que en la adulta, por lo que vuelve a ser necesario que los infantes tengan un ejemplo que seguir en sus casas”.
La dietista y nutricionista Paz Pérez Malillo añade que durante la pandemia y, sobre todo, después del confinamiento estricto, ha habido un aumento de peso en la población, “lo que no necesariamente lleva a la enfermedad cardiovascular, pero la obesidad si puede acarrear un síndrome metabólico”. Apunta a que la subida de peso “vino dada por la vuelta a los restaurantes, pues cuando estábamos en casa teníamos más tiempo para cocinar y lo hacíamos de forma más saludable”.
Aunque, sostiene que “también es algo cíclico que se ve con el paso de las estaciones, al prepararse físicamente para el verano, despreocuparse durante la temporada estival y retomar la rutina saludable con la llegada de septiembre”. Además, coincide con Zurdo en que hay una mayor incisión de la prevención de las enfermedades, “no solo a raíz de la pandemia, ya es algo que venía dándose desde hace unos años, aunque haya experimentado un pico mayor con la crisis sanitaria”.
Ejercicio físico
Entre las actividades deportivas preferidas por los zamoranos se encuentra el senderismo, que practican más de 13.000 personas, al menos una vez al mes, en la provincia, siendo 7.000 de ellos hombres y 6.000 mujeres. Los deportes relacionados con la montaña cuentan con un público mayoritario que está por encima de los cincuenta y cinco años. Además, las rutas largas forman parte de la dinámica de estos deportistas, estimándose que alrededor de 20.000 personas tienen, comparten o toman prestada una tienda de campaña en Zamora.
Sobre esto, Zurdo apunta a que la pandemia también ha provocado un cambio en la tendencia, generando un mayor interés por el deporte al aire libre y el contacto con la naturaleza, mientras que los gimnasios se vaciaron y están comenzado a repuntar ahora, pero de forma lenta. Además, “los usuarios suelen ser los que eran habituales antes y comienzan a retomarlo en este momento”, mientras que “los nuevos interesados por las actividades deportivas se inclinan por otras en campo abierto”.
Recomendaciones para una vida saludable después de los excesos del verano
El verano trae consigo terrazas, cenas con amigos y excesos que acaban poniendo en riesgo la salud. Por ello, con la llegada del otoño, hay una mayor predisposición a volver a una rutina saludable con la que “paliar” esos hábitos perdidos.
Paz Pérez tiene una serie de recomendaciones con las que prevenir las enfermedades cardiovasculares y adquirir costumbres saludables: eliminar el alcohol de la dieta diaria; llevar una dieta baja en carbohidratos refinados que perjudican la salud; incluir en nuestra dieta grasas de calidad, como las que se encuentran en el aceite de oliva virgen extra o el pescado azul; practicar ejercicio físico de forma habitual, evitando llevar una vida sedentaria; tener un peso saludable; consumir un nivel equilibrado y suficiente de fibra; favorecer la ingesta de alimentos antioxidantes como el chocolate, el ajo, las frutas y las verduras.
Además, tener un sueño de calidad y suficiente es imprescindible para gozar de una buena salud. La falta de sueño impide que el cuerpo controle el nivel de azúcar en sangre, aumenta la presión arterial y la inflamación, genera que se coma en exceso, debilita el sistema inmunitario y afecta a la salud mental.
