Defender la convivencia, la tolerancia y la igualdad entre españoles

No es nuevo que la derecha no soporte que se formen gobiernos legítimos de ideología plural, progresista y de izquierdas

Mª Cruz Hernández

Mª Cruz Hernández

En estos tiempos de ingravidez y evanescencia política resulta difícil hacer un análisis riguroso de la actualidad, de lo que realmente ocurre, de lo que verdaderamente pensamos las personas de a pie frente a tanta crispación.

Defender la convivencia, la tolerancia y la igualdad entre españoles

Defender la convivencia, la tolerancia y la igualdad entre españoles / Mª Cruz Hernández González

Escucho atentamente a presentadores y tertulianos de radios y televisiones y deduzco que, a ellos mismos, les cuesta, en muchas ocasiones, hacer una valoración seria y precisa de tantos conflictos artificiales. Porque no es fácil comprender tanta idiocia y tanto sectarismo de la derecha.

Desde mi perspectiva personal, voy a intentar hacer un análisis razonable y racional, sin duda, subjetivo, de lo que ocurre. Yo pertenezco a esa generación que nacimos en la dictadura franquista, que celebramos la transición, que nos implicamos en la Democracia y la Libertad y que apoyamos la Constitución Española de 1.978.

Personas, ciudadanos y ciudadanas de Zamora, como del resto de nuestro país, España, que hemos creído en la Democracia como el sistema político imperfecto más perfecto que hay. Porque nos permite decidir por nosotros mismos ejerciendo nuestro derecho al voto, aceptando los resultados electorales cuando gana o pierde la izquierda, en la que me significo, o cuando gana o pierde la derecha, con la que no comparto ideología.

En estos casi 50 años de Democracia, desde la muerte del dictador, hemos pasado de ser un país en blanco y negro, a formar parte de una identidad europea, dentro de un estado plurinacional, España, que quiso entender en la Constitución de 1978 las diferencias ideológicas y territoriales para salir de un oscuro pasado de cuarenta años de franquismo.

Lo que está sucediendo en este tiempo no es nuevo. La historia más reciente de España ya ha pasado por esto. A la derecha, la que representa el Partido Popular, ahora junto a la ultraderecha de Vox o los restos de Ciudadanos, no le gusta que gobierne la izquierda. Porque consideran, en primer lugar, que el Gobierno de España es un privilegio que les pertenece, como a la monarquía la jefatura del Estado. Y no soportan que, aunque los resultados electorales le otorguen la mayoría democrática, se formen gobiernos legítimos de ideología plural, progresista y de izquierdas.

No ser la mayoría del Gobierno les impide gestionar, manejar y repartir, o repartirse, el dinero público. Ese con el que se han enriquecido históricamente de manera ilícita. La corrupción endémica y sistémica del PP de ahora

En segundo lugar, no ser la mayoría del Gobierno les impide gestionar, manejar y repartir, o repartirse, el dinero público. Ese con el que se han enriquecido históricamente de manera ilícita. La corrupción endémica y sistémica del PP de ahora, antes de los falangistas.

Y en tercer lugar, les subleva eso que las personas de izquierdas denominamos Estado del Bienestar. La sanidad pública, la educación pública o las pensiones, por citar algunos ejemplos. Porque para ellos los impuestos no son más que un gravamen que se les resta a los ricos para repartir entre personas con menos recursos, lo que viene a denominarse solidaridad y equidad. Esas personas son para ellos chusma, vagos o los de la paguita.

Y para ello las derechas y ultraderechas han utilizado, utilizan y utilizarán todo su aparato propagandístico mediático contra los gobiernos de izquierda que, legítimamente, han dirigido, en alternancia, nuestro país desde 1982. Lo hicieron contra Felipe González, lo hicieron contra José Luis Rodríguez Zapatero y lo están haciendo contra Pedro Sánchez.

Si es necesario agitar la situación económica la agitarán, si es necesario crear una realidad paralela la crearán, si es necesario decir que España se rompe la romperán ellos mismos. Lo importante es, como ellos mismo dicen, expulsar del Gobierno de España a sus gobernantes legítimamente elegidos, por procedimientos democráticos recogidos en la Constitución y en nuestras normas de derecho.

Al PP, a Vox y a Ciudadanos, es decir, a Feijóo, a Abascal y a Arrimadas, les da lo mismo que España esté superando las crisis económicas y sociales del Covid, les da lo mismo que el empleo se siga manteniendo, les da lo mismo que las políticas del Gobierno de España que preside Pedro Sánchez estén orientadas todos los días para ayudar a las personas, a las clases medias y trabajadoras. A quienes en un momento de su vida tienen dificultades.

Niegan medidas positivas evidentes en momentos difíciles porque prefieren que las crisis las paguen los que menos tienen. La solidaridad es para ellos beneficencia, porque eso les permite que siga existiendo la diferenciación entre ricos y pobres

Niegan medidas positivas evidentes en momentos difíciles porque prefieren, como ya hicieron Aznar y Rajoy, que las crisis las paguen los que menos tienen. La solidaridad es para ellos beneficencia, porque eso les permite que siga existiendo la diferenciación entre ricos y pobres, entre la élite económica y social y las clases desfavorecidas que tienen que seguir siendo proletarios sin tener ninguna opción de futuro.

Prefieren a las mujeres de la sección femenina, porque eso de la igualdad es cosa de rojos y feminazis. Prefieren pensionistas humillados, trabajadores sin derechos, jóvenes sin futuro.

Prefieren conflictos en Cataluña y el País Vasco, porque eso les permite seguir enfrentando a los españoles. Rajoy estaba encantado con los conflictos entre catalanes como a Aznar, en su engreimiento, le gustaba decir que hablaba catalán en privado. ETA, disuelta hace diez años, sigue siendo su mantra.

Pues eso, los ciudadanos que creemos en la Libertad, en la Democracia, en la convivencia, en la tolerancia, en la solidaridad, en la igualdad, en el futuro y en la unidad seguiremos luchando por defender nuestros valores.

(*) Secretaria de Igualdad y Política Social del PSOE de Zamora

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