Zamoreando

El Pregón de Antonio

García Barbeito viene a inaugurar la Navidad en el club del periódico

Luces de Navidad en la Plaza Mayor

Luces de Navidad en la Plaza Mayor / JOSE LUIS FERNANDEZ

Carmen Ferreras

Carmen Ferreras

En esta Navidad de 2022, en la que el mundo tiembla de hambre y de guerra, de paro y de miedo, la voz de ese heraldo gozoso que es el pregonero de la Navidad, viene a despertarnos de tanta tristeza, de tanta incertidumbre, de tanto miedo para enseñarnos a mirar la vida con los ojos ardientes de un niño cuando espera a los Reyes Magos. Hoy, en nuestra ciudad, en el Club de La Opinión-El Correo de Zamora, que se traslada al magnífico teatro del Seminario Diocesano San Atilano, un pregonero excepcional, de voz profunda como sus propios sentimientos, que cuida el arte de la palabra que hace poesía, Antonio García Barbeito, viene a inaugurar la Navidad.

Contar con Antonio García Barbeito es una gozada, un privilegio y un honor. Llegadas estas fechas está solicitadísimo en toda España, pero, esta vez, Antonio ha elegido Zamora

Lo hará a través de un cuento que lleva narrando, por toda España, cuando asoman estas fechas, por lo menos desde hace más de veinte años. Un cuento que a nadie deja indiferente y que, en un párrafo muy concreto, la pregonera del pasado año, la escritora Pilar Río, lo incorporó en su estado puro, es decir en la voz de Antonio, a su propio Pregón. Antonio conoce sobradamente las razones de por qué hubo un día que Jesús no quería nacer. Tampoco sería de extrañar ante lo que el mundo ofrece, ante el pobre legado que vamos a dejar a las futuras generaciones.

Contar con Antonio García Barbeito es una gozada, un privilegio y un honor. Llegadas estas fechas está solicitadísimo en toda España, pero, esta vez, Antonio ha elegido Zamora, consciente de que es la única ciudad del mundo que en la entraña de su nombre lleva escrita la palabra amor, lo que puede suponer un lecho de esperanza para que el Niño quiera nacer, quiera venir a traernos la paz que pisoteamos y el amor que, cuántas veces, desdeñamos. Y, porque, además, Antonio tiene aquí buenos amigos, como Paco que, a buen seguro, inmortalizara en un dibujo ese momento.

Y porque en la extensa y maravillosa biografía de Antonio, figura su paso como integrante de la familia de Caja Rural en su tierra, y la Fundación que lleva su nombre es quien nos patrocina. Y porque, como siempre, su pregón es benéfico, destinado en esta ocasión a la Asociación ‘Compartimos Contigo’ de Zamora. Todo se ha confabulado para hacer realidad la presencia de Antonio García Barbeito en nuestro Club de Prensa. Me permito, para concluir, aportar aquella gran lección de Georges Bernanos: «No olvidéis nunca que este mundo odioso se mantiene en pie por la dulce complicidad -siempre combatida, siempre renaciente- de los santos, de los poetas y de los niños. ¡Sed fieles a los santos! ¡Sed fieles a los poetas! ¡Permaneced fieles a la infancia! ¡Y no os convirtáis nunca en personas mayores!» Bienvenido seas, Antonio García Barbeito.

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