La política es el arte (o el “desarte”) de interpretar los sondeos de intención de voto, más la suma de intereses particulares y la resta de los contrarios. Que se lo digan a Mañueco y a sus asesores que llevan meses expurgando el calendario venidero para dar con la tecla que les mantenga en el machito, quitándose de encima a los tocacojones de Ciudadanos y a los que puedan llegar de la España Vaciada. Dicho y hecho, ya hay fecha para votar: la víspera de San Valentín, día de san Benigno, que falta nos hace que nos rocíe con sus favores en estos tiempos de mala gente.

Entre políticos anda el juego: alguien miente. Seguramente todos nos engañan al explicar las razones y las contra razones de la convocatoria electoral adelantada, la primera en la historia de Castilla y León. Mañueco y el PP culpan a la “deslealtad” de Ciudadanos, estos a Pablo Casado por buscar una excusa para borrar del campanario mediático (al menos por unos meses) a Ayuso, que parece que nunca ha roto un plato, pero que aparece en todas las mesas, y hasta ya tiene verbo propio: ayusear, que hay que ser poco originales.

El PSOE del yin y el yang, de Ana Sánchez y Tudanca, también anda encabronado porque no ha podido controlar la manija y Mañueco ha desactivado su segunda moción de censura, esta sí con visos de triunfar con el apoyo de ¿Ciudadanos? y de los abulenses díscolos. Es lo que tiene cuando no se conduce el camión, que uno es víctima de las brusquedades del chófer. Pero, bueno, alegría, que las urnas pondrán a cada uno en su sitio. O no; que habrá que volver a pactar y el que chifle el último, capador.

De momento, los primeros trasquilados, los de Ciudadanos: Igea y Verónica Casado y los otros dos consejeros, fulminados, que no se han enterado de donde venían los tiros. No es de extrañar que Igea, el de la voz empedrada, entrara y saliera de las ondas de Alsina como un clavo ardiendo en un chopo seco y lanzara con mala leche, tras enterarse del cese, una pregunta retórica de barra de bar contra Mañueco: ¿Qué cojones piensas de tu población?

Y la población, ¿qué piensa de Igea, Mañueco, Tudanca y compañía? Pues que andan a su bola, que por el interés te quiero Andrés. ¿O no? Pues eso, elecciones el 13 de febrero y a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga. ¿Y las plataformas de la España Vacía? Ese, ese es el quid. ¿Y el virus del Covid? Por aquí, por ahí corre como una exhalación.