Todos en algún momento de nuestra vida, hemos tomado algún tipo de fármaco para algún problema de salud, bien sea algo grave o leve, incluido los conductores, pero ¿Realmente conocemos los efectos que producen en la conducción?

Lamentablemente no, y no los conocemos porque no leemos los prospectos de los medicamentos, y así ignoramos si el fármaco que estamos ingiriendo puede afectar negativamente en la conducción.

No podemos olvidar que todos los medicamentos tienen un triple efecto, por un lado, el terapéutico, por otro, los efectos secundarios y en tercer lugar, los posibles efectos adversos.

Los efectos más importantes que pueden afectar negativamente en la conducción si tomamos medicamentos son:

Somnolencia.

Pérdida de coordinación psicomotora y reducción de reflejos.

Cambios de comportamiento, confusión, aturdimiento o mareos.

Dificultad para la concentración.

Trastornos del equilibrio o sensación de vértigo.

Problemas en la percepción sensorial, visual, auditiva en las distancias...

Efectos que ponen considerablemente en peligro nuestra propia vida y la de los demás usuarios de la vía, por ello, antes de ponernos a pilotar un automóvil, debemos de conocer los posibles efectos que origina ese medicamento en nuestra conducción.

(*) Delegado provincial de la Fundación AVATA de ayuda al accidentado en Zamora