El que filosofa está en disidencia respecto de las imágenes reinantes en su mundo antecedente y contemporáneo.

El título de este artículo fue escrito por Goethe , la calidad o realidad de una democracia se corrobora si asume el pluralismo natural, legítimo y constructivo de una ciudadanía que sufre, piensa y busca soluciones a los problemas que la afligen, la ciudadanía además de estar representada por las instituciones debe participar con un orden jurídico que evite abusos sectoriales o partidistas en la constitución de la voluntad política que la gobierna . La legislación educativa que actualmente modela, modula y constriñe la difusión y transmisión de la cultura en España está cargada de inconvenientes, ineficacias, gastos inútiles, fuerzas coactivas administrativas que desangran la ilusión y la profesión del docente y que dejan sin el maná del conocimiento al discente. El gran filósofo alemán G. Gadamer remontándose a la Atenas clásica, en su obra “Plato und die Dichter.1934” ( Platón y la Poesía), escribió hace ochenta años : “ Desde que la sofística determinaba el espíritu de la educación dejó de existir un “ethos” estatal de carácter unificador que pudiere asegurarle a la poesía su correcta repercusión e interpretación”. Evidentemente, un Estado corrupto donde “ La Justicia no es real ni en la moral ni en el orden de la sociedad” no podrá dejar de cometer abusos y de contaminar la sabia neutralidad del conocimiento con venenos ideológicos. Sí los mismos venenos fanáticos que en la Alemania nazi expulsaron de la Universidad a sabios como el judío Jakob Klein cundo estaba redactando su extraordinario tratado “ La Logística griega y el desarrollo de la Aritmética” en 1936. El pensador libre nunca tendrá cobijo de nadie es el destino de los creadores huérfanos de mecenas, a no ser en un estado que ampara democráticamente por igual los intereses y derechos legítimos de todo ciudadano y ejerza su fuerza liberadora.

Luis Fernando Torres Vicente