Ha pasado un mes y el Banco de España sigue igual. Cerrado a cal y canto, con la valla sin abrir y el material que dejó la anterior empresa adjudicataria a la intemperie. Mucho me temo que esta va a ser la estampa para los próximos tres meses. Ojalá me equivoque.

El pasado 14 de octubre se iniciaba el plazo de cuatro meses dado por el Ayuntamiento de Zamora para que la empresa ejecute los trabajos. Nada se sabe de las obras. Con el calendario en mano, lo he podido comprobar ‘in situ’. Me di con la valla en las narices. La empresa ni está, ni parece que el equipo del alcalde la espere.

El viernes el Grupo Municipal de Ciudadanos solicitaba información al equipo de Gobierno sobre estas cuestiones. Nada hay en el Banco de España y nos gustaría saber qué ocurre, si las discrepancias entre el Ayuntamiento y la adjudicataria son insalvables y no tienen vuelta atrás, y qué hará este equipo de Gobierno si pasan otros cuatro meses sin que se haya hecho nada en lo que pretende ser el nuevo cuartel de la Policía Municipal y Archivo del Consistorio. ¿Serán otros cuatro meses perdidos para un proyecto que acumula cuatro años de retraso?, ¿tendrán que seguir pagando los zamoranos 90.000 euros al año por la nada, por el alquiler de un edificio completamente inutilizado?

Titula LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA que “El Ayuntamiento se pone “en lo peor” con el nuevo fiasco de las obras del Banco de España”. Ya tenemos algo en común, señores de Izquierda Unida. Nosotros también nos hemos puesto “en lo peor”, pero ya de hace tiempo. No hay que ser muy listo para hacerlo viendo el devenir de este proyecto desde que las obras comenzaron en 2016 y se paralizaron a los pocos días.

No han sido pocas las advertencias de Ciudadanos en este tiempo de que no se puede optar simplemente por dar las obras a la oferta más baja. Ya conocemos las consecuencias. En el último contrato la baja ha sido del 13,6%, con un ahorro de 120.000 euros que ahora nos saldrá caro a los zamoranos.

El equipo de Gobierno no ha sabido dar una solución a la sede del antiguo Banco de España más allá de optar por la obra más ventajosa económicamente, sin tener en consideración otras cuestiones y con los perjuicios que supone para la ciudad.

No ha habido movimiento en el recinto de la plaza de Cristo Rey ni parece que vaya a haberlo tampoco en los impuestos municipales, al menos a la baja. Así nos lo espetaba el primer teniente de alcalde y portavoz de Izquierda Unida al resto de portavoces de los grupos esta misma semana en una tertulia radiofónica. Parece que ni el Banco de España sale adelante ni los empresarios y autónomos de esta ciudad verán mitigada su carga fiscal en este año de pandemia y de crisis sin precedentes no solo sanitaria sino también económica.

Hemos propuesto la reducción de impuestos como el IBI, la tasa de basuras y el Impuesto de Vehículos para empresas y autónomos afectados por la crisis. El tejido económico de la ciudad necesita ver disminuida su presión fiscal en estos tiempos de reducción de la actividad y de restricciones que incluso impiden trabajar a algunos sectores.

El portavoz del equipo de Gobierno nos ha insistido: no habrá bajada de impuestos. Se niegan a pesar de tener un Ayuntamiento rico con 31,5 millones de remanente de tesorería, fruto del ahorro y del esfuerzo de todos los zamoranos. Aun así, lo seguiremos intentando, aunque nos demos una y otra vez con una especie de muro o con la pesada e infranqueable valla del Banco de España que todavía no han conseguido abrir.

(*) Portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Zamora