El viernes en que otra vez de momento / la Junta cerraba la hostelería, / en la Diputación se repetía / lo que ya viene a ser un esperpento.
El grupo del PSOE en un intento / de denunciar presuntas grosería / de quien manda con raras mayoría / en Pleno nos plantó ¡Y a tomar viento!
No fueron los primeros que lo hicieron: / días antes con motivo del AVE /de la “dipu” a ministros plantón dieron.
Pues a inaugurar la nueva vía no fueron / -férrea protesta- porque aquí no cabe / el tren madrugador que suprimieron.
Madrugó quien más manda en el plantón. / Mas quedan dudas si el que al final planta, / como el que ríe el último, es mejor.
En el turno de defender mociones / sólo quedaron los de izquierda “unía” / que de nuevo también repetiría / que Zamora no está para plantones.
Y que al no haber gastado los millones / para la muy maltrecha economía / que cada autónomo y empresa sufría, 7 se dedicara a nuevas subvenciones.
Propusimos al Pleno que gastaran / en parados, empresas, municipios / más de cuatro millones que sobraban.
Y en la Diputación no se quedaran / con superávit y con beneficios / al lado de negocios que cerraran.
No era este nuestro tren madrugador / -el presidente ante esto respondía- / Que gasten otros antes es mejor.
No comprometió ayudas a la gente / de la provincia que escuchar quería / que hubiera ayudas a la tierra mía / de los millones de los remanentes.
Tampoco aunque se las da de valiente / con plantón a la Junta se atrevía / si el consultorio médico no abría / para ver los enfermos frente a frente.
No cuidar la salud es lo que mata / a la gente. Pero a la economía / es el cierre lo que nos la arrebata.
Y la falta de ayudas inmediatas / cuando se necesita y no tardía. / Que no es ayuda si la ayuda tarda.
Pero ante esto en la dipu defendían / que paguen otros rápidos cual AVE / con tren madrugador que antes había.
Lejos del sufrimiento de la gente / de quienes sobreviven en Zamora / aunque pierda habitantes cada hora, / sacan pecho y se hacen los valientes.
Y así dijo su espiche el presidente / a quien no estaba desde hacía una hora. / Y hablando de empresas, de una tal “Eurona” / perdió hasta la neurona inteligente.
No le oyeron a quienes dirigía / esta vez sí soflama impertinente / que en los oídos sordos se perdía.
Mientras, a todo el mundo sorprendía / el soliloquio del señor presidente / que “excusatio non petita” hacía.
Un plantón de los pueblos de Zamora / en la Diputación se necesita. / Y gritar: “lo que se da no se quita, / Santa Rita Rita, ni se demora”.
Más de cuatro millones te has ahorrado / de lo que ante la prensa presumías / ¡pues gástalo con honra y bonhomía / entre los que en ti han confiado!
