Tenía que ser Caja Rural quien, para desbloquear el proyecto de vuelta de la vida militar a Monte la Reina, diera el primer paso poniendo encima de la mesa el “primer millón de euros”. No tendría por qué ser Caja Rural la primera en desembolsar, en pasar a la acción, en demostrar que esto va en serio, pero en vista de la inacción de tantos, una vez más, Cipriano García ha vuelto a estar a la altura de las circunstancias. No es solo que Caja Rural en su conjunto apueste por Zamora y los zamoranos, es que a título individual, su director general y su presidente, Nicanor Santos, están por esa labor. Antes de que se iniciaran las negociaciones, Caja Rural apostaba ya por la vuelta de los militares.

Zamora y su futuro dependen del Ejército. Unos lo ven así, otros lo niegan y apuestan por salidas que no existen. Zamora con el Ejército gana, sin el Ejército pierde. Nos espera un invierno muy duro, muy difícil y si no lo afrontamos con alguna esperanza de futuro inmediato como esta, lo vamos a pasar francamente mal. Sé que el jefe del Estado Mayor del Ejército, general don Francisco Javier Varela Salas, está por la labor porque sabe que en Zamora se quiere a las Fuerzas Armadas. Estuvimos conviviendo con el Ejército muchos años y aquel roce generó un cariño que no se olvida fácilmente.

Alguien, a quien corresponda, tiene que dar el siguiente paso. Tengo para mí que el Ministerio. Tengo para mí que los políticos a un lado y otro deben implicarse sin excusas, sin levantar el índice acusador, sin evasivas y sin subterfugios. No vale empeñar la palabra de lo poco o mucho que de caballeros tengan los políticos, para desempeñarla según convenga. El Ejército en Zamora ¡ya! Preferiría que ese anhelo no estuviera guiado por el egoísmo de ver crecer la ciudad y la provincia gracias a ellos, de ver prosperar y nutrirse de nuevas almas una ciudad que se apaga lentamente. De todo habrá. Yo los quiero entre nosotros y con nosotros, porque los quiero, porque dan vida, dan calor, dan servicio, hacen el bien sin mirar a quien. Y porque donde hay un cuartel, aunque se levante a unos kilómetros, en nuestro caso Monte la Reina, allí está España en toda su esencia.

Cipriano García ya ha hablado, lo ha tenido siempre muy claro. A ver qué tienen que decir ahora el resto de instituciones a las que no veo muy proclives, las cosas como son. Algún titular incluso se ha manifestado negativamente al respecto. Es labor de todos.