Será muy descabellado, pero y si desde las “alturas globales” hubieran caído en los graves problemas que asolan la vida en el planeta y que son de una evidencia que casi nadie quiere ver, como:

El cambio climático y sus crecientes efectos dañinos.

La menor disponibilidad del diésel derivado de un petróleo más difícil de extraer y menos apto para destilarlo y que es la base de cualquier actividad o mejor, es la economía misma.

El crecimiento exponencial de la población en un planeta de recursos finitos.

La grave crisis ecológica que está destruyendo innumerables espacios marinos y terrestres, desaparición de especies y un largo etcétera.

La imposibilidad de continuidad de un sistema capitalista en el medio/largo plazo que, literalmente, tiene que prenderle llamas a la casa donde vivimos para crecer.

Y la pregunta que se podrían hacer las “alturas globales” es: cómo podríamos parar el mundo por que el futuro es poco bonito y fácil de adivinar para quienes estamos más o menos informados sobre estos asuntos.

Y mira por donde aparece un bichito muy pequeñito y pone en bandeja las soluciones para hacer “entrar en razón” a los casi 8.000 millones de personas (en 1960 éramos 3.000) y muy especialmente a ese 20 % de la población que consumimos el 80 % de los recursos…Así que quizá no sea muy descabellado.

Ramón Rodríguez Sanz