Cuando se van acercando las fechas estivales, los pueblos grandes y pequeños de nuestra provincia, van organizando con tiempo suficiente las fiestas patronales para el disfrute de todos los vecinos.

Este año como consecuencia del brote del COVID-19, la mayoría de nuestras fiestas se han visto alteradas de una forma muy importante, llegando en la mayoría de los casos a la supresión completa de las mismas.

Sin duda, unos de los principales atractivos de las fiestas de San Pedro en Zamora, lo representaban la exposición de cerámica que se celebraba en torno a la plaza de Viriato y la feria del ajo, que inundaba con su aroma, la Avenida de las tres Cruces de Zamora.

Una buena parte de los productores de ajos de las comarcas del Vino y de la Guareña, contaban cada año con esta feria, en la que poder dar salida a la cada vez mayor producción de ajos de gran calidad que se cultivan en sus huertas y que durante una buena parte del año les dedican una buena parte de su tiempo para conseguir un producto de gran calidad.

Cuando se suspendieron las fiestas de Zamora, uno de los atractivos que tenía para la mayoría de los ciudadanos este acontecimiento, la feria del ajo, también se vio en peligro de no poder celebrarse y muchos visitantes, no iban a poder adquirir esas ristras que durante una buena parte del año colgaban en sus cocinas.

En ese momento, el ayuntamiento de Tábara, pensando en el problema que podía representar para los productores de ajos, no disponer de un espacio donde conseguir dar salida a toda la producción que habían tenido, pensó ofrecerles el mercadillo tradicional que todos los sábados se celebra Tábara, para que pudieran dar salida a la producción que habían tenido.

En este intervalo de tiempo, surgió la iniciativa de trasladar esta exposición y venta de ajos al recinto de IFEZA en Zamora, pero siendo conscientes de que aunque el marco para la exposición en el mejor que se le podía disponer en ese momento, muchos productores, no verían cumplidas las expectativas que esperaban obtener de su producción y las ventas no resultan lo mismo que en ediciones anteriores.

Siendo conscientes desde el Ayuntamiento de Tábara del problema que podía representar para estos productores, se siguió adelante con el proyecto de ofrecerles el espacio que necesitarán en Tábara, para poder dar salida a la producción que habían tenido.

Se ha hecho un ofrecimiento a todos los productores de ajos y hasta el momento han confirmado la asistencia: Florencio Lorenzo, María José Hernández y Tomás Carracedo, Juan Carlos Cuadrado

Para ellos el Ayuntamiento de Tábara ha dispuesto el pasillo central de la plaza mayor, donde estos productores y alguno más que pueda asistir hasta el día de la celebración, puedan disponer del espacio que necesiten para exponer sus productos el próximo sábado día 11 durante toda la mañana.

Confiamos que todos aquellos que no pudieron asistir al recinto ferial, se desplacen el sábado día 11 de julio hasta Tábara para poder adquirir este ingrediente tan esencial y necesario en nuestra cocina y en nuestra dieta.

.Únicamente, recordar a los asistentes, las normas que todos debemos guardar en cuanto a las distancias con otras personas y mantener el uso de las mascarillas como medida de prevención.

José Almeida