Durante este tiempo que estamos en nuestras casas a consecuencia de la COVID-19, y teniendo en cuenta mi situación de jubilado, he dedicado y dedico parte de mi tiempo a la lectura de El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha" pero, he de confesarles que de una forma muy reposada y como no lo había hecho nunca, me explico: analizando el significado de cada palabra o frase empleada por Miguel de Cervantes y, créanme que me produce un placer especial, máxime si a ello unimos que la edición es de Anaya, con ilustraciones de José Ramón Sánchez, Premio Nacional de Ilustración y, edición, introducción y notas de Ángel Basanta, lo máximo.

Recomiendo a los jóvenes, que procuren aficionarse a la lectura y a leer El Quijote, descubrirán y tendrán sensaciones inolvidables, enriquecerán su vocabulario y sabrán apreciar la buena calidad de nuestros escritores patrios.

Recuerdo que, durante mis casi treinta años de dedicación a la enseñanza, por vocación, no por el sueldo, que daba para muy poco, siempre que tenía ocasión y las circunstancias lo permitían o venía a cuento, permítaseme la expresión, hacíamos una referencia al Quijote, pues, los consejos de D. Quijote, el sabio hidalgo, a su escudero Sancho Panza, acerca de su comportamiento y gobierno de la ínsula.

De todos es conocida la faceta de D. Quijote, como "homo jurídicus", al tener que enfrentarse, a lo largo de su vida, a varios procesos judiciales, al embargo de sus bienes, al ingreso en la cárcel por deudas, etc.... Especialmente comentábamos en clase los consejos referentes a temas relacionados con la justicia. Me viene a la memoria, después de los años, el consejo de D. Quijote a su amigo Sancho, referente a la ley del encaje, que tanta gracias les hacía a los alumnos, sobre la arbitrariedad. La ley del encaje es la forma de resolver los asuntos de forma arbitraria, esto es, de forma contraria al principio de seguridad jurídica.

D. Quijote le decía a Sancho: "Nunca te guíes por la ley del encaje, que suele tener mucha cabida en los ignorantes que presumen de agudos".

"Hallen en ti más compasión las lágrimas del pobre, pero no más justicia que las informaciones del rico ".

"Procura descubrir la verdad por entre las promesas y dádivas del rico como por entre los sollozos e importunidades del pobre".

" Si acaso doblares la vara de la justica que no sea con el peso de la dádiva, sino con el de la misericordia" .

Hay mil y una frases en El Quijote que merecen la pena ser analizadas y para ello nada mejor que la lectura de un ejemplar con notas sobre su significado.

Recuerdo que esta Semana Santa, leía la expresión mutatio caparum que significa cambio de capas, como hacían los Cardenales el día de Resurrección, por otras más ligeras, pero en el contexto que aparece en El Quijote, es cambio de aparejos.

Para los más jóvenes que quieran iniciarse en la lectura de El Quijote, les diré que hay una edición de la Real Academia de la Lengua Española adaptada por Arturo Pérez Reverte, quien dice: "La presente edición sigue con fidelidad extrema el texto original utilizado, que es el de la magnífica edición impresa por Ibarra publicada en 1870".

Mis queridos lectores, espero y deseo que en estos días de confinamiento hayan dedicado un tiempo a la lectura, pues, la lectura es fuente de cultura y compañía en la soledad impuesta.

Para concluir estas líneas y teniendo en cuenta que llevamos un período donde una día sí y otro también aparecen en el BOE normas y más normas, llámense Reales Decretos, Ordenes, Resoluciones o como ustedes quieran, pero nos entendemos, D. Quijote en uno de sus consejos a su amigo Sancho Panza, le decía: "No hagas muchas pragmáticas y, si las hicieres, procura que sean buenas y, sobre todo, que se guarden y cumplan; que las pragmáticas que no se guardan lo mismo es que si no fuesen; antes van a entender que el príncipe que tuvo discreción y autoridad para hacerlas no tuvo valor para hacer que se guardasen; y las leyes que atemorizan y no se ejecutan, vienen a ser como la viga, rey de las ranas, que al principio las espantó y con el tiempo la despreciaron y se subieron sobre ella".

"Si estos preceptos y estas reglas sigues, Sancho, serán luengos tus días, tu fama será eterna, tus premios colmados, tu felicidad indecible". Ánimo y esperemos que esta situación pase cuanto antes. Les deseo salud.

Pedro Bécares de Lera