Según José Borrell, uno de los políticos más experimentados y sólidos de la UE, el "Brexit" ha generado un efecto vacuna. Por mi parte sería más cauto, y diría que depende de cómo le vaya al Reino Unido separado y a ese inmoral populista que es Boris Johnson. Si le va bien, o consigue aparentar que le va bien, no será efecto vacuna, sino contagio. Téngase en cuenta que a partir de ahora el nacionalismo británico hará lo que todo nacionalismo, echar a la gente contra el enemigo exterior, que ha pasado a ser la UE. Una política fácil, falaz y simplona, pero efectiva. Tiene una larga negociación por delante para, día a día, ir poniendo ladrillos al muro y a la vez ir culpando al que está al otro lado (nosotros) de sus problemas. La única vacuna frente al populismo nacionalista es volver a educar a la gente, empezando por ayudar a que deje el tuit y lea periódicos.