Las palabras, con frecuencia, son el vocablo inapetente que apretujado entre la charlatanería, mira y no se decide a salir. A veces (muchas de nuestras expresiones) son la impresora que se vanagloria de ser una buena copista. Lo definitivo nunca se establece junto al "pero", al contrario, creo que al lado de semejante palabra se paraliza el valor y todo es tentativa de parálisis.

¿Por qué razón, muchas veces, hundimos nuestras voluntades junto a la excusa? Ciertamente, las cosas más fabulosas, son las que más miedo nos dan. La vida es un gran escenario, por lo tanto, es importante entender que junto a ella se retarda la muerte y todos los "peros" sobran. Hay palabras que son la blasfemia del valor. Palabras que enferman amores, palabras que cortan alas.

Sí, palabras que nos impiden volar; palabras que no nos dejan encontrar en otro país el tiempo perdido que firma mensajes sin rubrica, palabras que nos condicionan a la hora de avanzar; palabras (que por desgracia) son presencia y pervivencia escondidas entre la rutina. Es inútil tener una actitud vacilante, lo originario y genuino, se monta en grandes trasatlánticos y no tiene miedo a hundirse. ¿Saben? Todo en la vida tiene su sitio, por lo tanto, debemos saber ver que junto al "pero" está la tiranía que nos convierte en mártires, sí: pobres infelices guerreando por nuestro propio destino.

A diario podemos verlo... Qué de veces decimos: ya, pero... Y por lo visto (sonrío) fijamos para la eternidad lo de las señales. Ah, no, qué tonta soy, me estoy confundiendo con lo de los pelos. Pardiez, en qué estaría pensando.

Cuántas personas son la preferencia de la excusa que no estalla junto al valor. Creo, que muchas vidas, son la seguridad celosa que emplea un lenguaje lleno de imágenes. Entiéndase por imágenes todo aquello que se puede ver... ¿Y en qué lugar queda el sentir? Junto a los "peros" tarde o temprano todo es resignación; ahora bien ( para muchas veces) es lo más cómodo. Hay personas que son la casualidad que entusiasma a la locura y personas que son el desagrado de la alucinación. Quiero terminar con el pensamiento de gran mujer que,además, es una escritora a la que admiro. Anaïs Nin: "Lanza tus sueños al espacio como una cometa, no sabes lo que traerán de vuelta, una nueva vida, un nuevo amigo, un nuevo amor, un nuevo país".