Las recientes elecciones que ha habido en España, a la que nos han llevado la irresponsabilidad, e incapacidad negociadora de nuestros políticos de izquierdas, para lo único que han servido es para dar más cancha a los ultras, xenófobos y machistas de Vox.

Porque los ciudadanos hastiados, desencantados y artos de la incapacidad e imposibilidad de entendimiento de los partidos mencionados, han decidido:

Los imbéciles, los idiotas, guiados por la ignorancia, los que siguen las consignas contenidas en mensajes falsos y engañosos, han votado a partidos extremistas -que les ofrecen soluciones inmediatas, independentistas, y nacionalistas patrioteros, que no patriotas.

Los reflexivos, han decidido abstenerse, pues han pensado, con muy buen criterio, que unas nuevas elecciones no servirían para resolver el bloqueo, incluso que la situación empeoraría.

Y por último los miedosos que han optado por el voto del miedo, (valga la redundancia).

Todo esto mezclado ha dado como resultado el ascenso de la ultraderecha más radical e intransigente. Pero seguramente ninguno de los responsables (irresponsables) de esta situación se sentirá culpable y, seguramente, echará la culpa a los otros.