Cuando aquel casi provecto estudioso de cosas varias, conocido por su cinefilia, me hizo, compartiendo una cerveza inesperada a la salida de un acto con media docena de asistentes, esta rara confesión, no daba crédito: que tras haber visto tres veces la película "Solo los amantes sobreviven", de Jim Jarmusch, había quedado prendado de Ava (Mia Wasikowska), la supergamberra hermana menor de la vampira Eve (Tilda Swinton) y vampira ella también. No volví a verlo hasta mucho después, y a cierta distancia, cruzando a saltitos la calle fuera del paso de peatones con una mujer de media edad pero aspecto juvenil colgada de su brazo, que me recordó a Ava de forma automática, o sea, sin pasar por lo que él había confesado aquel día (esto llegaría más tarde a mi cabeza con su carga explicativa de la mano). Aunque parecía no haberme visto saludó de espalda con la mano, sin volverse.