Con el nuevo inicio del curso escolar, comienzan también nuevos desplazamientos por nuestras carreteras con menores a bordo, por lo general en autobuses o microbuses que realizan trasporte escolar. Los viajes en este tipo de vehículos, suelen ser bastante seguros, pero es conveniente que los padres o tutores legales de los menores, les informen de los posibles peligros que pueden surgir en este tipo de medios de transporte, al igual que explicarles que deben de tener un excelente comportamiento dentro del vehículo.

En los autobuses donde al menos la tercera parte de los alumnos trasportados tiene menos de 16 años, es obligatoria la presencia de un acompañante, que debe de velar por el buen comportamiento y seguridad de los alumnos, pero aun así, no está de más informar y educar a nuestros hijos en temas relacionados con la seguridad vial. Estos automóviles tienen que tener la autorización pertinente para transportar escolares y deben tener pasadas y en vigor las inspecciones técnicas.

La movilidad de los menores ha de ser una prioridad, ya que cada día se mueven aproximadamente 630.000 alumnos en los autobuses escolares.

Hay que educar y concienciar a los escolares de los riesgos que corren al ir en autobús, ya que los accidentes de tráfico, se pueden producir con el autobús en movimiento o cuando está inmovilizado, cuando cruzan por delante o detrás de él, debido a que no los ven los vehículos que adelantan al autobús, o el riesgo que puede producirse n cuando es el propio autobús el que efectúa un movimiento sin controlar a todos los pasajeros. No hay que olvidar que el 1% de los fallecidos en accidentes de tráfico durante 2018 fueron niños de hasta 14 años.

Las recomendaciones, recogidas por AESVI, ( Alianza española por la Seguridad Vial Infantil), para proteger a todos los niños en sus desplazamientos al colegio son:

- En un transporte escolar, el momento más peligroso se produce al subir o al bajar del autocar ¡el niño no debe pasar por delante o detrás del vehículo para evitar situaciones de riesgo! Según datos de la DGT, el 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en el momento de subir o bajar del vehículo o justo en los instantes inmediatos.

- Hay que respetar las zonas de parada, ir con tiempo suficiente, y enseñar al niño a subir o bajar de forma ordenada, sin empujar a otros niños. Evita riesgos y no esperes al niño al otro lado de la calzada, de lo contrario el niño podría cruzar la calle de manera imprudente.

- Durante el recorrido, los niños deben permanecer sentados en su asiento con el sistema de retención adaptado a sus necesidades, y respetando las instrucciones de seguridad.

- El resto de conductores, no debe adelantar al autobús escolar mientras deja o recoge a los niños en la parada.

- Como padre o adulto responsable del menor, debes comprobar la seguridad de los autocares en los que se desplaza el niño, solicitar al centro la contratación de autocares con cinturones de 3 puntos y comprobar que un monitor acompaña a los niños durante el trayecto.

Si viajan en coche, debe utilizarse siempre un Sistema de Retención Infantil adecuado a su talla o peso, por corto que sea el trayecto, introduciendo o sacando al niño siempre por el lado más seguro, el de la acera.

- Verifica que el niño viaja bien sujeto y sin holguras en los arneses, evitando prendas o elementos que eviten la correcta sujeción a la silla, y nunca con la mochila puesta. El SRI debe instalarse en las plazas traseras y, si es posible, en el asiento trasero central.

- Ir con tiempo al colegio para evitar aparcar en doble o triple fila. Obligamos al pequeño a pasar entre coches, aumentando el riesgo de accidente.

- Instala la silla siguiendo cuidadosamente las instrucciones del manual de uso del fabricante y su etiquetado y verifica su anclaje. Para los más mayores es aconsejable usar una silla con respaldo hasta los 150 cm de altura, ya que proporciona protección frente a impactos laterales. Y para los pequeños, recuerda que, aunque la obligatoriedad de llevar al bebé en contra de la marcha es hasta los 15 meses es muy conveniente que alargues esta posición tanto tiempo como te sea posible. Esta posición favorecerá en gran medida la protección de su cuello, cabeza y espalda.

Si el desplazamiento es en bicicleta es importante que los pequeños vayan con su casco y se hagan ver a través de elementos de iluminación y prendas reflectantes, sobre todo en otoño e invierno.

- Cuando vayan con la bici deben señalizar las maniobras, y sobre todo ser conscientes de que hay que tener cuidado con los peatones, justando la velocidad y circulando con precaución. El colegio debe habilitar una zona para dejar la bicicleta.

- La mochila no debe ir sobrecargada de peso, ya que podría desestabilizar al niño.

- Es recomendable que los adultos acompañen a los niños y niñas las primeras veces, identificando los puntos peligrosos, los cruces y pasos de peatones (y la forma de cruzar). Se les debe explicar también que deben circular de forma tranquila y segura. Y como peatones, lo primero y más importante es conocer la ruta, evaluar sus riesgos, y enseñar a los pequeños la importancia de ir con tiempo, vigilando el tráfico en todo momento.

- Enseñar a los niños la técnica para cruzar de forma segura: hacerlo siempre por las zonas habilitadas para ello, esperar a que los coches se hayan detenido, y mirar antes de cruzar, primero a la izquierda, luego a la derecha y de nuevo a la izquierda.

(*) Delegado de ProVial España en Castilla y León.