Y es que los titulares parecen redactarse, más que para interesar, para amedrentar a la gente, o para sacar fuera lo peor de cada uno, cómo si la mayoría de los lectores fuesen morbosos. Y aunque esa hipótesis no sea del todo incierta, la verdad es que hay mucha gente que prefiere alimentarse de buenas noticias, de aquellas que afectan a temas agradables y positivos, porque ayudan a huir del pesimismo y facilitan la respiración, aunque se viva en un presente infausto.

Obsérvese cómo el titular de este mismo artículo que reza "Asesinan a tres personas en Zamora", nos estremece y llega a descuangeringarnos los sentidos. Pero ¿cómo ha podido suceder tal desgracia? dirán muchos, y no sin razón, ya que, sin duda, se trata de un acto extremadamente bárbaro. Para colmo, la aclaración posterior, esa que dice que "entre ellas hay una mujer", viene a despertar mayor interés, ya que ahí si que viene a aparecer el morbo, y siempre hay alguno que desea conocer quién o quiénes fueron los autores del múltiple asesinato, y también sus razones, si es que las tuvieron.

Hasta ahí es hasta donde podríamos llegar si solo nos limitáramos a leer los titulares. Pero si nos adentráramos en la lectura del artículo, no solo veríamos que es cierto que se han producido tales delitos, sino que forman parte de un todo, en el que 51 mujeres más han resultado asesinadas durante el último año. De manera que nuestra capacidad de sorpresa se volvería a alterar al tornarse el asunto más escabroso.

Por otra parte, los datos de la noticia no casan con los que tenemos almacenados en la memoria, porque el total de mujeres asesinadas en España, el pasado año, fue menor del que ahora se cita en este caso de Zamora (concretamente fueron asesinadas 47 mujeres) así que caería sobre nosotros el telón de la duda, puesto que nadie podría llegar a entender cómo es posible que en Zamora se hayan podido producir más crímenes que en el conjunto de España.

Pero si continuásemos leyendo, veríamos que no existe tal error y que, ciertamente, se han producido tales hechos, y que las cifras que se citan se corresponden con la realidad. Pero lo que no se ha dicho, hasta ese momento, es que esa Zamora a la que se refiere la noticia, no es ésta, la Zamora en la que nosotros vivimos, sino la Zamora de los Estados Unidos Mexicanos, la Zamora de Michoacán, uno de los 31 estados que, junto con la Ciudad de México, conforman aquel inmenso y rico país.

Si siguiésemos enganchados e indagásemos en Internet, veríamos que la noticia ha sido publicada hace unos días, concretamente el pasado 10 de junio, en "El Sol de Zamora", periódico dirigido por Dalia Martínez Delgado, en Morelia (México). De manera que todo es cierto, pero, sin duda, no teníamos bien ubicada la noticia ya que esa Zamora, en la que viven 150.000 personas, forma parte de una provincia de 250.000 almas y pertenece al estado de Michoacán, donde viven más de cuatro millones de mexicanos.

La primera reflexión que nos vendría ahora a la mente sería la de tratar de entender como una sola provincia mexicana, con 150.000 habitantes, puede llegar a acumular un número de mujeres asesinadas similar al que se viene produciendo en toda España, donde vivimos 48 millones de personas.

Según las últimas estadísticas, en México vienen siendo asesinadas una media de 9 mujeres por día, pero la Zamora mexicana ha disparado tal estadística. Y es que las cifras no engañan, y las del caso que ahora nos ocupa tampoco, porque en la Zamora de allí se cometen trece veces más crímenes que en el resto de México, y trescientas cuarenta y siete veces más que en cualquier ciudad española, equivalente en número de habitantes.

Pues eso, que aquella Zamora mexicana ubicada a 1.560 metros de altitud, en la que predominan los lagos y las tierras fértiles, y que tiene un equipo de fútbol que ha jugado en la 1ª División, dando buenos jugadores como Rafa Márquez, aquel excelente defensa que jugó varios años en el F.C. Barcelona, no es una Zamora como para ponerla de modelo.

Es cierto que podíamos haber pensado, además de en la Zamora de aquí, y en la de allí, también en la Zamora de Ecuador, o en la Zamora de California (EEUU) o en la playa de Zamora en Fuencaliente, en las Islas Canarias, y en cada una de ellas nos encontraríamos historias diferentes. De manera que es necesario leer las noticias en su totalidad, analizando su contenido, y a ser posible contrastarlas, porque solo así podremos evitar sufrir más de un sobresalto.