"Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad" Einstein

Cuando oímos hablar de la palabra "memoria", solemos relacionarla con un método de aprendizaje y de acumulación de datos en nuestro cerebro, referente, especialmente, a temas de estudio, aunque su concepto es mucho más amplio. Aquí en estas breves líneas, me limitaré a hacer una breve referencia a la memoria y su importancia en el ámbito estudiantil, pues, que duda cabe que hemos de cultivar la memoria dada su importancia en el aprendizaje y acumulación de datos, como he apuntado al comienzo, ahora bien, hemos de tener en cuenta que para ello es necesario tener buenos métodos y técnicas de aprendizaje y nemotécnicas, que debería ser asignatura obligatoria, en los primeros años de estudio.

Recuerdo que en mis años de estudiante se cultivaba la memoria a base de repetir y repetir, hasta la saciedad las definiciones, como si estuvieras aprendiendo una poesía, creo que no era buen método, porque una vez superado el examen corrías el riesgo de olvidar lo aprendido. Hemos de tener en cuenta que la memoria es fundamental, en todos los ámbitos de la vida y hemos de desterrar, de una vez y para siempre, esa frase extendida en mundo estudiantil de que la memoria es la inteligencia de los torpes, a mi juicio totalmente errónea.

El ejercicio y desarrollo la memoria requiere, fuerza de voluntad, esfuerzo y gran dedicación, no admite relajación y exige mucha concentración. La repetición, sin más, para ejercitar la memoria, a mi juicio , no s buen método, hemos de emplear técnicas de estudio y de aprendizaje idóneas, y ejercitar la voluntad, ello es fundamental, pues, solo vía repetición, el aprendizaje memorístico se convierte en aburrimiento y el aburrimiento es el enemigo número uno del estudio.

Podemos observar que, en los momento actuales, el ejercicio de la memoria, teniendo en cuenta los teléfonos móviles y demás útiles informáticos, ha quedado un poco apartada, permítaseme la expresión, y ello no debe ser así, máxime cuando el estudiante o el opositor, en el momento del examen no tiene el móvil o el ordenador sobre la mesa, al alcance de la mano, para proceder a su consulta y ha de dar las respuestas correctas a las preguntas, de acuerdo a sus conocimientos. Me viene a la mente un tema en relación con el mundo estudiantil, en su fase infantil, cual es la referente a los deberes. Con independencia de la opinión personal de cada uno, pues, sobre este tema escribí un artículo titulado ¿Qué pasa con los deberes escolares? Lo que sí estimo de interés es que los padres deben enseñar a sus hijos a ser autónomos y a hacer los deberes por sí mismos.

Los padres no pueden ser los profesores, lo que sí deben los padres es dar ejemplo a sus hijos, a fin de que se aficionen a la lectura y al estudio. Los padres han de inculcar a sus hijos que aprender no es igual que estudiar, aprender es mucho más que estudiar.

El aprendizaje requiere fijeza, esfuerzo, dedicación, concentración, atención y asimilación de conceptos y afecta a toso los ámbitos de la ciencia. En el ámbito estudiantil es fundamental el aprendizaje en las distintas etapas y pasos de la educación, esto es, de primaria a la ESO, al Bachillerato y a la Universidad, pues, los cambios para algunos estudiantes, especialmente cuando acceden a la Universidad, y se encuentras con gran libertad, si no saben hacer uso de ella, puede ser su perdición, por ello, deben ser orientados en el bachillerato en el buen uso de la libertad y la planificación del estudio y del aprendizaje, así como del empleo del tiempo.

No quisiera terminar estas líneas sin hacer una referencia especial a los profesores y su importancia en el aprendizaje y en el ejercicio de la memoria, pues, sus métodos y técnicas de estudio son fundamentales desde la infancia. Un ml profesor puede arruinar la vida de un estudiante, al hacerle indigerible una determinada materia.

Creo que todos hemos tenido experiencias de profesores cuyas explicaciones dejaban mucho que desear y de nefasto recuerdo que, a Dios gracias, pasaron al olvido, perro somos conscientes que no hacían nada atractiva la materia en cuestión.

Los profesores deben hacer atractiva la materia y explicar de forma clara y comprensiva, de tal forma que el alumno salga de clase, prácticamente con la lección aprendida, y perfectamente comprendida.

¡Qué buen recuerdo de los buenos profesores! Olvidados los malos.