Los hay que pasan por la política sin comprometerse mucho, sin gastarse mucho, viviendo de perfil y sólo mostrándose cuando hay que hacer una buena pose para salir bien en la foto. Los hay que, con dudosa maestría, se 'cambian de chaqueta' cuando les empieza a incomodar o no les sirve para sus intereses, mientras intentan hacernos creer que siguen luciendo la misma.

En política como en botica hay de todo, y para muestra un botón, el del señor Antidio. Que de repente ha tenido un halo de iluminación y decide calificar la política turística de sus socios de gobierno de "errática y dispersa". Y estamos de acuerdo, y añadimos volátil, sin rumbo, a gusto del concejal del área y muchos otros calificativos. Pero, eso sí, la diferencia es que desde Ciudadanos lo dijimos desde el primer día y lo mantendremos hasta el final del mandato, mientras el señor Fagúndez no tiene problema en obviar sus propias declaraciones, y sin atisbo de rubor presentar ese proyecto que él previamente descalifica en Fitur.

Cuando no se tienen las manos atadas, y no se hace de la política una profesión es sencillo ponerse del lado de los ciudadanos, ser coherentes y defender lo justo. El convidado de piedra que ha sido el señor Antidio en todos los plenos del actual mandato, como una esfinge que prácticamente no respiraba, ya fuera objeto de las más duras críticas, no creerá que podrá desligarse con facilidad de las decisiones en las que ha sido copartícipe con sus socios de IU, y ante las que no ha levantado la mano ni para decir esta boca es mía.

Un claro ejemplo es el ámbito turístico. En el bipartito no ha habido ni una sola voz discordante que le dijera al señor Strieder que ese no era el camino, que no se podía actuar a bandazos, que un 'hotel' para insectos en Olivares era una ocurrencia difícilmente calificable, mientras no movía ni un dedo para poner en marcha proyectos de relevancia internacional como la capitalidad gastronómica, que le hemos pedido insistentemente desde nuestras filas.

Es lamentable y bochornoso que el concejal de Turismo anuncie a bombo y platillo el citado hotel para insectos y no haya apoyado a la hostelería de la capital, para que pudiera promocionar la excelente materia prima y cocina con la que contamos. Nosotros le tendimos la mano, de hecho le pusimos en contacto con el responsable del certamen para la capitalidad gastronómica, que mostró su interés por conocer en qué fase se encontraba nuestra futura candidatura, pero una vez más todo quedó en saco roto.

No resulta lógico y nos puede parecer hasta bochornoso que en una ciudad con la riqueza artística, cultural e histórica con la que contamos, las ideas de la Concejalía para promocionar nuestra capital en ferias internacionales como Fitur se hayan circunscrito a promocionarnos como "ciudad para las mariposas".

Zamora es una joya modernista, es una joya románica, es una joya gastronómica, pero promocionamos insectos varios y mariposas. Incalificable.

Desde el grupo municipal de Ciudadanos Zamora hemos tratado de sobreponernos a estos sinsentido y buscar la forma de colaborar con el equipo de gobierno en la promoción de una ciudad que nos importa. No somos un partido del "y tú más" ni del "cuanto peor mejor". Nos votaron para mejorar nuestra capital y para aportar ideas.

De esta forma, nos implicamos con el desarrollo turístico llevamos a pleno la creación de una línea de rutas turísticas con las que hacer visibles todo nuestro capital artístico, la puesta en marcha de una plan para la visualización del modernismo, propusimos la recuperación de la Feria del Queso y del Vino, que tan buenos resultados para la promoción de nuestros productos consiguió en tiempos pasados, propusimos la rehabilitación de las aceñas de Cabañales para incluirlas en los 'Paseos del Duero', y un largo etcétera? Todas ellas consiguieron el apoyo del pleno y todas esperan en un cajón.

Ahora el Ayuntamiento trata de sacar pecho de las recientes cifras de visitantes, como si fueran el resultado de la entusiasta política entomológica llevada a cabo por Strieder. Pues bien las interpretaciones son subjetivas. Nuestra provincia ha crecido después de un estancamiento de años, pero lo ha hecho junto a otras provincias de la región y, en menor medida, que ciudades cercanas a la que no tenemos nada que envidiar en cuando a potencial artístico e histórico, como pueden ser Salamanca o León.

El turismo está creciendo en todo el país, también en la región. Cierta recuperación económica está ayudando, pero más allá de los datos de visitas están los económicos, las cuentas que hacen nuestras empresas a final de mes y en las que comprueban si esa cifra se traduce en ingresos para la hostelería, uno de los sectores que, junto al comercio, más empleos crea en la ciudad. Con ellos son con los que hay que contar también para que esto no quede en espejismo, y no se ha hecho.

(*) Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Zamora