He leído diferentes definiciones de partido político y todas ellas afirman que se trata de asociaciones voluntarias de personas perdurables en el tiempo que aspiran a ejercer el poder político participando en los procesos electorales con programas de gobierno para la sociedad en su conjunto. Sin duda esto es cierto, pero esas definiciones son incompletas porque engloban también a partidos imperialistas y nacionalistas en los que las variaciones internas dentro de los mismos son demasiado amplias como para permitir un único método de investigación.

El imperialismo de la raza fue aplicado en África del Sur y el de la burocracia en Argelia, Egipto y la India, el de la superioridad de la raza aria en Alemania; para "Hitler el Parlamento no era un fin en sí mismo, sino simplemente un medio para un fin? El partido Nazi no era un organismo más en el sentido democrático de la palabra, sino una conspiración orgánica contra el Estado". El ideólogo del aplastamiento del Partido Comunista de la URSS en 1937 mediante las purgas de figuras importantes miembros del Comité Central del Partido, fue el ruso Boris Ponomarev que en 1968 era Secretario del Comité Central del Partido Comunista, Ponomarev había impuesto internamente la "disciplina bolchevique". A lo que era un movimiento de poder los rusos lo seguían llamando partido político.

No intento desarrollar en un artículo periodístico una teoría general sobre los partidos nacionalistas ni siquiera seleccionar unos pocos ejemplos para cada tipo, que tampoco puedo analizar tanto individualmente como comparativamente, por tanto, nos vamos a limitar en señalar los aspectos generales para llegar a alguna conclusión que tenga valor universal.

Los partidos nacionalistas, tanto sin son nacionalismos de unificación del que podemos tomar como modelo el Garibaldino como sí lo son de ruptura utilizan el término "nacionalismo" como argumento para obtener o ejercer el poder del Estado, y justifican sus acciones con argumentos nacionalistas que consideran superiores a todos los demás. Todos dan por sentado:

-La existencia de una nación anterior al nacimiento de los Estados.

-Los intereses y valores de la nación tienen prioridad sobre todos los demás.

-Y, puesto que la nación existe tiene el derecho imprescriptible de obtener la soberanía política.

Italia, desde la caída del Imperio Romano de Occidente (476 de nuestra Era) hasta 1870, se había caracterizado por la falta de unidad nacional, durante ese largo lapso de tiempo había vivido bajo la influencia directa e inmediata del cosmopolitismo de la Iglesia de Roma, la cual por definición su doctrina es internacional y cosmopolita. "La Iglesia de Roma había contribuido a "desnacionalizar" a los intelectuales de la península romana que, por otra parte, tampoco permitía la organización de católicos como fuerza política nacional en la Italia tardía. Cuando lo hicieron fue debida a la presión al Vaticano con un mensaje nacionalista.

Los líderes del movimiento independentista, no partido político, exigieron "igualdad" al Gobierno de Londres y, al no obtenerla, independencia, y justificaron su exigencia con invocación a los derechos humanos universales. Afortunadamente los Padres Fundadores de los Estados Unidos de Norteamérica, John Adams, Benjamín Franklin, Alexander Hamilton, John Jay, Thomas Jefferson y George Washington llevaron sus exigencias de implantación de los derechos humanos universales a la Constitución de su país, convirtiéndolo en el primero del mundo donde se afirmaron esos derechos. El nacionalismo después de la independencia pasó a tener una función muy diferente y menos distintiva. Los partidos políticos se han identificado con valores relacionados con las libertades de las personas, con el progreso y el bienestar común. Quizá los Estados Unidos no serían hoy lo mismo de no haber sufrido una guerra civil, pero el hecho real es que su Constitución es una garantía para asegurar la libertad de sus ciudadanos.

La doctrina nacionalista separatista de los quebequeses de Canadá se basa en la existencia de una lengua, pero su doctrina, o bien, no ha estado suficientemente elaborada o carece del apoyo político para conseguir la separación, lo cual es bastante comprensible en una sociedad culta y abierta a las exigencias de las modernas tecnologías.

El análisis de los movimientos políticos nacionalistas colonialistas, es más complicado que ningún otro. De entrada no se pueden definir como partidos políticos en el sentido que nosotros lo hacemos.

Para nosotros la definición de partido político es una organización con una estructura jerarquizada, dotada de unos estatutos que regulan su funcionamiento interno, que políticamente tiene como ideal las libertades individuales y colectivas de todos los ciudadanos sin distinción de raza, religión, sexo o cualquier otra circunstancia étnica, que pretende conseguir el bienestar y la felicidad de todos, aceptando las normas políticas democráticas para alcanzar el poder.

En el apartado de los nacionalismos colonialistas la variedad abarca todo el espectro de la política, hay nacionalismos independentistas tribales, ideológicos, liberales, románticos, lingüístico, étnicos, de elites, de masas, pacífico, violento y de carácter religioso. Los ideológicos se han dado con más frecuencia en las naciones iberoamericanas, entre los tribales y étnicos en las naciones africanas en las que hay una gran cantidad de etnias culturales de lenguas de origen camita, fundamentalmente en el Sahel y centroafricanas. Con los mismos ingredientes tribales y religiosos se encuentran en las naciones de la cuenca Mediterránea cuyas lenguas son de origen semita. Los movimientos recientes surgidos en el espacio geográfico de Medio y Próximo Oriente, no pueden catalogarse como partidos políticos aunque su aspiración sea la implantación de la nación árabe o musulmana. La mayoría han sido declarados por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas como organización terroristas, algunos quizá con alguna ligereza por convenir a los intereses de Occidente, pero en ningún caso se pueden considerar como partidos políticos al uso en Occidente.

El Partido del Congreso indio mantuvo una disputa constante en cuanto a las tácticas políticas relacionadas con el uso de la violencia, o en cuanto al tema de la participación en las instituciones del Raj. Mahatma Gandhi, líder del Movimiento independentista nacional que difundía un mensaje pacifista de desobediencia civil contra la potencia colonialista, fue asesinado por un radical indio, Nathuran Godse.

Los movimientos surgidos recientemente en Europa no pueden considerarse de ninguna manera como partidos políticos en el sentido que nosotros lo expresamos aunque sus estatutos hayan sido aprobados porque son constitucionales, pero fundamentan su doctrina en la aplicación de normas contra unos colectivos de ciudadanos a los que consideran inferiores por razón de sexo, religión o costumbres y no en promoever la igualdad entre las personas

(*) Concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Peñausende.