En memoria de Andreas Faber Káiser y de Federico, dos víctimas en el tiempo del capitalismo.

"Para no dejarse arrastrar por la corriente solo queda un recurso al alcance de todos: pensar". Andreas Faber Káiser.

" No quiero llantos. La muerte ha de mirarse cara a cara. Silencio. ( Lorca la casa de Bernarda Alba).

Es posible que Lorca no vagara amnésico ni que despertara con esa luz prodigiosa. Es posible también que huyera y fuera a vivir a Cachemira , y que allí empezara una vida y muchos años después recordara?

Jesús ese hombre judío que todos los años nace y muere, ese mito casi revolucionario para unos y odiado por otros. El líder de la buena nueva, el hombre lleno de contradicciones para los realistas y para los fanáticos su guerrillero. Una mañana ese hombre cansado de tantas mentiras huyó con los gomeles a Cachemira y en las puertas de Granada dio vida a un Lorca triste que le seguía . A lo lejos llegan voces de la Alhambra " Al entrar en la ciudad parando su yegua blanca . Desde la vega va oscureciendo llega el silencio y Federico ebrio de luna sueña con volver a su Granada". Jesús trata de convencerle que la historia le persigue y que ha llegado la hora de huir de los lobos. Pero el poeta no quiere aún, tiene una obra por estrenar le esperan sus compañeros y la barraca sigue.

La máquina del tiempo, la que soñamos cuando no queda esperanza, devuelve al poeta a las calles de Madrid 1981, los cantautores sueñan con un abril revolucionario y el poder económico de nuevo mata y destruye vidas. Él ahora tiene otros compañeros y le queda aún una lucha pendiente.

Dos mitos, tres hombres que también hoy 2018 aún buscan un destino, uno en una mentira perenne religiosa que le niega su verdad y su revolución en Roma, por lo que le mataron, otro que no quiso ver la muerte y enterraron su poesía en un barranco en Granada. Y otro que por luchar contra el poder farmacéutico que mato en España en 1981 a 1.100 personas y dejo 60.00 enfermos denunciando en su libro Pacto de Silencio toda la verdad sobre el llamado aceite de colza también fue silenciado. Toda una vida Jesús 2018 años, Lorca 82 y Andreas Faber káiser 24. Tres hombres y su destino final.

De nuevo vuelve a las calles la Navidad, Jesús está vivo, Federico regresa a Granada y como Andreas aún espera que se haga justicia.