El instituto Valverde de Lucerna de Puebla de Sanabria cumple 25 años. Los institutos rurales, como el nuestro, desempeñan un papel muy importante en la historia del lugar dónde se ubican, dando respuesta formativa y educativa a toda la población de la Comarca Sanabresa, que difícilmente hubiera tenido acceso a este bien común.

Quizás, han sido subestimados y a veces considerados como centros de segunda clase respecto a los institutos urbanos pero esta jerarquía responde al imaginario social de valorar más lo urbano que lo rural y de esperar más (eficiencia social) de la población e institutos urbanos que de los rurales.

Cuando hablo de despoblación siempre tengo en cuenta este primer concepto de "imaginario social" que ha llevado a que la educación en España esté orientada a que todos los alumnos desarrollen su proyecto de vida en las zonas urbanas. En una palabra; educamos, incluso en los pueblos, a nuestros alumnos para que se vayan a las ciudades.

Socialmente, un maestro lo es más si trabaja en la ciudad, un médico si está en el 12 de octubre y un trabajador de banca es más importante si lo hace en la central urbana y no en la sucursal de Puebla de Sanabria. Por ello, me parece muy importante el lema empleado en la celebración de este importante aniversario; La Educación: El futuro de nuestras comarcas.

No quepa la menor duda que en el instituto Valverde de Lucerna está el futuro de la Comarca y esa es la primera consideración, los institutos rurales no pueden ser los parientes pobres del sistema educativo. El potencial del sistema educativo está en los valores que envuelven de manera natural tanto a la escuela como a los institutos rurales, donde la colaboración es necesidad, así como la relación intergeneracional o la responsabilidad educativa compartida por toda la comunidad. Es en el contexto rural donde existe una menor distancia entre el entorno y el edificio que la recoge, donde los valores más humanos son reales y cotidianos. No existe la necesidad de generar artificialmente espacios de aprendizaje, de hecho, en el contexto rural se participa de los mejores resultados de Castilla y León en las pruebas PISA.

Existen algunas dudas evidentes: ¿Por qué las políticas educativas no favorecen la educación en el entorno rural? Pues bien, parece que todo lo situado en "el pueblo" es prescindible, innecesario o no rentable. Necesitamos un cambio de conciencia respecto al valor de lo rural, de la escuela rural y de los institutos rurales. Mientras, este aniversario puede servir, entre otras cosas, para comprender el valor del Instituto Valverde de Lucerna de Puebla de Sanabria y agradecer el empeño de todo el profesorado el actual y el pasado, debido a que todos han sumado esfuerzos. Hay que agradecer no solo a la formación académica, sino también a todos los que por el instituto han pasado y han mejorado su proyecto de vida.

Por último, estoy convencido de que el Valverde de Lucerna, heredero de su nombre de Unamuno y de la Leyenda del Lago de Sanabria, continuará, como hasta ahora, afrontando las nuevas realidades que quedan por venir, como lo ha hecho durante ya estos pasados 25 años.