A la hora de abordar el tema de los refugiados, algunos políticos alemanes muestran una insensibilidad increíble. En una reciente reunión de la CSU (Unión Cristianosocial bávara), uno de sus dirigentes, Manfred Weber, se refirió a este año como el de "la solución final del problema de los refugiados". Weber, eurodiputado y vicepresidente del PP europeo, no puede ignorar las connotaciones de las palabras elegidas: "solución final" es el plan del partido nacionalsocialista que condujo al holocausto del pueblo judío.

El ministro del interior austriaco, Herbert Kickl, propuso "concentrar" a los refugiados en un solo lugar. ¿Utilizó también tal palabra ese joven político del partido de la Libertad consciente de su relación con los campos de concentración durante el Tercer Reich?

¿Qué decir de la propuesta, esta vez de los partidos de la Gran Coalición alemana, la CDU/CSU y los socialdemócratas, de concentrar, aunque no utilicen esa palabra, a los refugiados en campos especiales donde esperarían a que las autoridades respondiesen a su solicitud de asilo? Como denuncia el semanario liberal "Die Zeit", los tres partidos parecen preferir una política de "concentración" masiva en unos pocos centros al alojamiento ofrecido por municipios y comunidades.

Quienes conocen la situación de esos refugiados advierten de que la solución propuesta sólo puede agravar sus problemas de integración. Tanto policías como sacerdotes y activistas de derechos humanos que conocen centros de ese tipo ya existentes en Baviera señalan que los refugiados no tienen prácticamente contacto con la población.

Según un estudio del Instituto de Investigaciones Laborales, hasta un 45% de los refugiados que han encontrado trabajo lo consiguieron gracias al contacto personal con el empresario, algo muy difícil para quienes habitan esos centros masivos. Y para esos refugiados, encontrar cuanto antes trabajo es fundamental dado que muchos tienen deudas pendientes con los traficantes de seres humanos o necesitan ayudar a sus familias.

Cuánto más difícil les resulte la búsqueda de un empleo regular, más probabilidades habrá de que recurran a uno de tipo clandestino y mal pagado o de que terminen delinquiendo, lo que alimentará aún más la xenofobia de la población local.