Nadie tiene la menor duda de que el colectivo de profesionales más importante en nuestra provincia es el de los autónomos. También es el que más ha sufrido en los últimos años una crisis demoledora de la que con el esfuerzo de todos estamos ya saliendo. Con la idea de respaldar a quien en su día decidió apostar por crear su propio negocio y, sobre todo, de impulsar y promover la iniciativa de nuevos emprendedores, está a punto de entrar en vigor una la Ley de Medidas Urgentes para el Trabajo Autónomo.

Esta nueva Ley beneficiará a los más de 17.800 trabajadores por cuenta propia que existen en nuestra provincia con medidas como la posibilidad de cambiar de base de cotización hasta en cuatro ocasiones a lo largo del año para adecuarla a los ingresos, o darse de alta y de baja en la Seguridad Social hasta tres veces al año para así pagar solo cuando haya actividad.

Además, las mujeres tendrán una tarifa plana de 50 euros cuando se reincorporen tras la maternidad y se bonificará al 100% durante 12 meses la cuota por cuidados de menores o dependientes. Se permitirá que los autónomos puedan deducirse el 30% de los gastos en suministros cuando trabajen desde su casa, y una deducción de hasta 26,67 euros diarios por gastos en dietas y manutención. Se reducirán los recargos que penalizaban a los autónomos por el retraso en el pago de la cuota y se reconocerá el accidente in itinere. Éstas y más medidas harán justicia con los autónomos, un colectivo al que los gobiernos del Partido Popular no dudó en ayudar en los peores momentos, con medidas como la tarifa plana de 50 euros, que ahora pasará de 6 a 12 meses. Todo con el objetivo de que el número de autónomos siga creciendo y se consoliden más y mejores derechos a su favor, equiparándose cada vez más a los trabajadores por cuenta ajena

Siempre he defendido que a los emprendedores y empresarios que a diario levantan la persiana de sus negocios y dan trabajo a otras personas convirtiéndose en sustento de muchas familias hay que ponerles alfombra roja y darles todo tipo de facilidades. Pero de nada sirven las medidas de la nueva Ley si resulta que en Zamora muchos tiran la toalla cuando para una licencia de obra o actividad esperan una media de 14 meses en un Servicio de Urbanismo y Obras que, lejos de mejorar en eficacia, como anunció el señor Guarido al llegar a la Alcaldía (entre otras muchas cosas que aún estamos esperando), está más atascado que nunca y suscitando el cabreo de muchos particulares y promotores. Esto lleva a la desesperación de quien ha decidido iniciar un negocio y arriesgar por su cuenta. ¡Eso no puede ser señor alcalde!

Conozco a más de uno que, harto de esperar, se ha ido a emprender a otras ciudades y Zamora no puede permitirse perder a uno solo de sus valientes. Lo primero que hizo el alcalde hace dos años fue cerrar el Registro de Urbanismo a pesar de su probada eficacia y sigue sin incrementar una plantilla que, claramente, es insuficiente para un servicio tan importante como Urbanismo. Señor alcalde, si los autónomos echan el cierre o desisten en sus iniciativas por la ineficacia del Ayuntamiento de Zamora, está usted condenando el futuro de Zamora.