Los cambios en la sociedad no siempre han sido para bien. El matrimonio es el que más ha sufrido el embate de las mudanzas en hábitos y costumbres que han traído las modas, los nuevos tiempos y todo lo demás. Claro que, en cuestión de sentimientos, puede que modas, nuevos tiempos y todo lo demás, nada tengan que ver. Cuando se acaba el amor, y no siempre de tanto usarlo, sobreviene la ruptura que siempre es dolorosa para las dos partes o por lo menos para una de ellas.

Lo curioso es que buena parte de las separaciones no se produce en los primeros años de matrimonio, que también. Buena parte de las separaciones se producen cuando se ha superado la barrera de los 60. En los últimos años, el número de personas mayores de 60 años que han decidido poner fin a su relación matrimonial ha aumentado considerablemente. Cosas de la convivencia. No aguantan más o no se aguantan más el uno a la otra y la otra al uno, y hala, ¡a separarse tocan y a misa va el que quiere! Hasta tal punto es así que las separaciones de personas de más de 60 años se han triplicado en España en tan sólo una década que, de prodigiosa no tiene nada.

No solo se separa el común de los mortales, gente anónima que toma una decisión y llega con ella hasta las últimas consecuencias. A los famosos también les toca. Ahí están Felipe González, Manuel Benítez "El Cordobés" y Mario Vargas Llosa como ejemplos. Entre los tres suman 231 años. Uno, supera con creces los 70 y los otros dos los ochenta. Es la tendencia generalizada además de en España en otros países de nuestro entorno y en Estados Unidos, ejemplos hay a montones, desde Susan Sarandon a Morgan Freeman pasando por Harrison Ford. Es un club cada vez más concurrido.

Los datos del Instituto Nacional de Estadística confirman que estamos ante un fenómeno al alza. Ahí van unas cifras que no dejan lugar a duda alguna. De 3.636 separaciones en 2005 entre personas que superaban los 60 años, se pasó en 2015 a 9.541. Es verdad que no es la franja de edad en la que más rupturas matrimoniales se producen pero sí es uno de los grupos en los que más se han incrementado. Incremento que se cifra en un 162%.

La gente mayor ha perdido el temor a separarse. Antaño el marido se llevaba con él la llave de la despensa, hogaño ya no es así debido, entre otras cosas, al cambio en los roles de género. Lo cierto es que son muchas las causas que influyen en el incremento de los divorcios llamados de plata, la ampliación del horizonte vital es una de ellas y otra que resulta muy curiosa, hay parejas que se separan tras la rupturas de los hijos, situación que toman como modelo y que les ayuda a verlo como algo normal. Muchos matrimonios insatisfechos, al margen de su edad, deciden dar el paso y cambiar su estado civil antes de seguir vinculando su vida a la resignación, el sacrificio o la conformidad. Eso dicen los expertos.