La sola pronunciación de su nombre debiera ponernos sobre aviso: mosquito. Además de pertinaces son la mar de puñeteros. De ellos no nos libramos nadie, sobre todo en verano y si se dan las circunstancias para que nos invadan. Uno sólo es capaz de hacernos la puñeta, en masa son la repera. Los más afectados les tienen verdadero odio. Y es que los mosquitos pueden jorobarte la piel y la vida con una sola picada.

Si será así, que más de 750.000 personas, ¡una barbaridad!, fallecen cada año en todo el mundo a causa de picaduras de mosquitos, lo que les convierte en animales 180 veces más mortales que los leones, los cocodrilos y los tiburones juntos. Así se recoge merced a distintos testimonios en el documental "Mosquito" dirigido por el canadiense Su Rynard. Bien es verdad que en nuestro hábitat los tiburones, los cocodrilos y los leones no son tan habituales como estos voladores que se pasan todo el santo día haciendo de las suyas. Entran a matar en nuestro cuerpo y después de banderillearnos convenientemente nos meten estocadas que, por lo que se sabe ahora, pueden causar distintas enfermedades e incluso la muerte.

El dengue, el virus del Nilo, la malaria y el zika son, como todos sabemos, algunas de las enfermedades transmitidas por estos insectos de acuerdo con las explicaciones de los expertos incluidos en la película de marras. Expertos que alertan de una posible pandemia global por la rápida expansión de virus letales para el ser humano.

Servidora, que vivió muchos años en Guinea Ecuatorial, sufrió alguna de las enfermedades propias del trópico, entre otras, paludismo y dengue. Muy suave este último porque la atención sanitaria y los medicamentos impedían su avance. Y le digo una cosa, prefiero un paludismo a una gripe. Quizá porque al haber estado tratada diariamente con antipalúdicos, la cosa no fue a más y en mi recuerdo no me provoca el rechazo que me provocan algunas gripes que he sufrido años ha.

La cosa no es baladí. Más de 2.500 millones de personas están expuestas a un posible brote de zika. Lo grave viene cuando descubren que tratar a todas ellas costaría más de 500.000 millones de dólares, siempre según los especialistas. En la pasta que hay que gastarse es donde radica el problema para muchos gobiernos que no están por la labor. Las farmacéuticas tampoco echan un cable. Parece ser que, por lo general, las enfermedades son transportadas desde el hemisferio sur por cuatro mosquitos la mar de puñeteros, sólo uno de ellos, el Culex, es el más común en España. Afortunadamente en España se dispone de un plan de protección ante los ataques de estos minúsculos animalitos del Planeta Azul gracias a distintos dispositivos la mar de eficaces. Y que nadie piense que con la llegada del invierno se acaba el problema. Los procedentes de África, Asia e Iberoamérica son capaces de sobrevivir en climas menos propicios. Y son mosquitos que matan.