Desde 1888 la Fundición Codina se ha consagrado como una firma con historia que está en la historia. Los Codina son una saga de fundidores que a lo largo de cinco generaciones vienen dedicando su vida a este noble oficio que en sí es todo un arte. Tuve el placer de visitar la Fundición, hace ya unos cuantos años, de la mano del recordado Raúl Prieto Cirac. Su amistad me permitió acceder a instituciones, organismos, empresas, centros de arte y lugares que para mí hubiera sido impensable poder visitar y además ser recibidos con el afecto y la distinción con que siempre se recibía a Raúl y a sus acompañantes.

In situ pude conocer el trabajo de la Fundición que se reparte por la práctica totalidad del mundo. Esta Fundición es la garante de una tradición que no debe perderse nunca: el procedimiento a la fundición a la cera perdida, que fue la preferida del escultor italiano Benvenuto Cellini. Además de conocer un dato que no deja indiferente, porque a lo largo de la historia de la Fundición que es la historia de la propia familia Codina, más de 750 escultores han confiado su obra a estos auténticos maestros que han empleado a lo largo del tiempo más de 12.000 toneladas de bronce fundido.

Por eso celebro enormemente que Zamora sea una de las ciudades de España donde hoy recala su aplaudida exposición "III Siglos de Escultura, Fundición Codina" que albergará el Antiguo Palacio de la Diputación Provincial de Zamora. Mayte Martín Pozo ha vuelto a acertar de pleno con esta nueva exposición que, hasta la fecha, se han disputado las más importantes ciudades españolas. Además de la más que necesaria sensibilidad social, que Mayte ha revalidado en tantas ocasiones, ha demostrado que también tiene sensibilidad artística, lo que la lleva a patrocinar y tratar de traer a Zamora lo mejor para que así no nos quedemos descolgados como en tantas ocasiones.

No sería justa si no reconociera el trabajo ímprobo que ha realizado el escultor e imaginero zamorano, Ricardo Flecha, que ha movido los hilos, ha ido y venido en multitud de ocasiones y viendo la trascendencia de esta exposición que ha contado y cuenta con las críticas más elogiosas, no ha parado hasta cerrar el compromiso que la trae a Zamora, espero y deseo que con el mismo éxito de público que ha tenido en tantas ciudades de España. La exposición puede calificarse de grandiosa. Es como una panorámica de la historia monumental de la escultura española que la muestra recorre a través de esculturas originales en bronce, réplicas a escala, moldes de barro y escayola de un importante número de piezas que constituyen una exposición única. Nadie como el propio Ricardo Flecha, que lo vive con pasión, para recorrer de viva voz la muestra que recoge parte de la historia de la escultura en España, que es también la historia de la propia Fundición Codina que forma parte de un patrimonio artesanal único. Quizá, la demanda estatuaria haya caído en España por parte de las instituciones públicas, pero siempre nos quedarán las obras que llevan el sello de la Fundición Codina y que se reparten por un buen número de ciudades: desde Nueva York a Lima, pasando por La Habana, Méjico y Madrid.

Desde hoy en Zamora se vive la más apasionante exaltación al bronce que, de entrada, marca un hito en la programación cultural de Zamora.