Por qué ese interés en cambiar el nombre de las calles? ¡Qué más da! Me parecen venganzas pobres. Porque por ejemplo, en el caso de Carlos Pinilla; tuvieron ocasión de hacérselo en vida, ¿Por qué no lo hicieron? Era cuando le hubiera hecho daño; ¡ahora!...

La madre Bonifacia, lo mismo. Una mujer que posiblemente entregó su vida al servicio de los demás olvidándose de sí misma. ¿Será por ser religiosa?

Ahora, ¿que quieren poner nombre a calles dedicadas a personas más del agrado de ustedes?, pues los pongan. Ahora tienen la ocasión, y unos y otros a respetar, que será lo mejor.

Me parece más importante solucionar los problemas de los vivos y dejemos en paz a los muertos.

En un programa de televisión presentado por Mercedes Milá cada día entrevistaba a un personaje. Uno de ellos recuerdo fue el señor Carrillo. Tras hacerle varias preguntas, le dijo: señor Carrillo, no puedo por menos de hacerle esta pregunta. ¿Que pasó en Paracuellos? Y este con mucha tranquilidad y serenidad le dijo: Señorita, en todas las guerras civiles se cometen atrocidades en un bando y en otro. Lo mejor será olvidar todos el pasado. Copiemos todos de esta respuesta y alejemos de revolver el fango. Viviríamos, sin duda, más felices y más hermanados ¿verdad?

Teresa Rosón