Como casi todos los españoles sabemos, a excepción del señor Sánchez, la Fiscalía Anticorrupción pide seis años de cárcel para Griñán y diez de inhabilitación para Chaves por el inmoral caso ERE. Como casi todos los españoles sabemos, a excepción del señor Sánchez, a Griñán se le acusa de delitos continuados de malversación de caudales públicos y prevaricación, a Chaves de un único presunto delito de prevaricación continuada, que no es poco. Como casi todos los españoles sabemos, a excepción del señor Sánchez, junto a los dos expresidentes de la Junta de Andalucía, la Fiscalía acusa a otros 24 ex altos cargos, entre ellos otros seis exconsejeros.

Pero como el señor Sánchez no está al corriente de lo que pasa en su partido o prefiere no estarlo, más preocupado por obstruir y destruir que por cualquier otra cosa, sigue erre que erre, hablando de la corrupción en el PP, de Rajoy -su ídolo-, de Rita Barberá, de Rato, de Bárcenas y de todos aquellos miembros del partido de la gaviota, salpicados por la bestia negra de la democracia: la corrupción. Por esa regla de tres, cuando Sánchez empieza a aventar su inquina, Rajoy podría contestarle con el "y tú más" del que, por otro lado, estamos más que hartos. No están en condiciones ninguno de los dos líderes de echarse nada a la cara y menos en materia de corrupción. Si ponemos sobre la balanza la que le pesa al PP y la que hunde al PSOE en Andalucía y en otras comunidades, es tal la cantidad de imputados del PSOE que quintuplica con creces a los del PP.

A mí no me gusta lo que ha hecho Rita Barberá, eso de aferrarse al sillón o lo que es igual al aforamiento, la deja muy mal parada. No me gusta Bárcenas, ya me caía gordo cuando era tesorero, ni Rato, un hombre que nunca debió meterse en semejante berenjenal, ni Soria que al fin y al cabo no tiene ninguna "adjudicación" delictiva por parte de la Fiscalía Anticorrupción, pero como no supo que además de ser honrado tiene que parecerlo pues ahora pecha con las consecuencias.

Tampoco me gustan quienes siempre formaron parte del clamor popular en Andalucía por haber traspasado los límites de la honradez. Los Griñán, Javier Guerrero, Magdalena Álvarez, también señalada por el dedo de la Justicia, y tantos y tantos otros. Como tampoco me gustan los Pujol y los Mas que se enriquecieron a lo bestia y de los que no se ha vuelto a decir nada. Ni Rita ni Rato, ni Maleni, ni Manolo ni Pepe. Solo que el Psoe pone la mano en el fuego por todos los suyos, a las declaraciones de doña Susana le remito, mientras el PP no puede hacer lo propio porque sale estigmatizado del envite.

No me gusta que haya dos varas de medir para lo mismo, no me gusta la hipocresía política imperante, no me gusta que los líderes de los partidos no asuman responsabilidades, no me gusta que se destaque lo malo de unos y se esconda lo de otros. Rajoy no ha dicho nada de Rita y Sánchez no ha dicho nada de Magdalena, de Pepe y de Manolo, entonces, ¿a santo de qué alzar tanto la voz para acusar a uno cuando lo del otro no tiene desperdicio?