1 Lo que pudiera deducirse de la entrevista realizada telefónicamente, y publicada en el periódico LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, así como del escrito presente, son opiniones personales mías, por lo que las de la junta directiva, y menos las de los colegiados, no tienen por qué coincidir.

2. Si a lo largo de dicha conversación en algún momento me expresé que "La foniatría no vale para nada", o pudiera deducirse de la misma es, como mínimo, lamentable por lo que, de ser así, lo siento y pido disculpas. Otra cosa es que considere que no son imprescindibles para el desempeño profesional del logopeda. De hecho hay miles de logopedas en España que están desarrollando su labor profesional de forma muy eficaz sin la colaboración del foniatra. Si necesitan un informe u orientación médica, siempre pueden recurrir a los servicios médicos correspondientes. De hecho hay muchas patologías, como las de la voz, en las que ningún logopeda iniciaría un tratamiento sin el diagnóstico y orientación del médico especialista, así como de sus reiterados controles.

3. Nada más lejos de mi intención que menospreciar a los foniatras, ni a ninguna profesión, lo que no considero ético. Es más, considero que la foniatría puede ser una excelente ayuda al desarrollo de la labor profesional del logopeda, diagnosticando, informando y orientando bajo el punto de vista médico, siempre y cuando respete las funciones competenciales del logopeda.

4. Reitero que la foniatría no es un título oficial reconocido por el Estado español, por lo que no capacita para un desempeño profesional. Es por eso por lo que los hospitales públicos no pueden contratar a foniatras como tales, tal y como recoge la sentencia.

5. Respecto a mis comentarios sobre las relaciones laborales entre la foniatra y la logopeda del Hospital Virgen de la Concha, de Zamora, simplemente me hago eco de las reiteradas denuncias que a este colegio ha realizado la compañera logopeda. A este respecto tengo que manifestar que conozco infinidad de foniatras que están colaborando de forma eficaz y en armonía con los logopedas.

6. Considero que los logopedas no estamos en guerra con los foniatras. Al contrario. Creo que sería beneficioso para ambas profesiones, y para la sociedad, que lograran validar oficialmente su título y desempeñar su profesión con normalidad respetando las correspondientes al logopeda.

Le agradecería la publicación de estas aclaraciones.

Francisco Lorenzo Carrasco

(Presidente del Colegio Profesional de Logopedas de Castilla y León)