Algo novedoso: un viaje largo a un sitio desconocido, un cambio de ciudad para vivir, un trabajo nuevo en el que somos inexpertos, alguien nuevo de visita en casa, ser huéspedes en una casa, mil y una situaciones más de la vida en la que lo novedoso nos da respeto, o quizá miedo. Dice un refrán castellano que "más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer"; traducción práctica: no emprendas, no innoves, quédate en lo de siempre porque "siempre se ha hecho así".

Jesús es novedoso. Los discípulos están asustados porque creen que han visto a un fantasma. No tienen que tener miedo. Tienen que entender que hay algo nuevo: lo lógico es que si alguien ha muerto y ha sido sepultado no volvamos a verlo y ya no nos visite. Pongámonos en la situación de aquellos hombres en que su maestro, el "líder del grupo de amigos", después de ser condenado a muerte y sacrificado, vuelve a visitarles y desearles la paz. Nuestro rostro quedaría desencajado. Nos vendrían a la mente tantas preguntas? ¿cómo puede ser? ¿Estaremos locos? ¿Es cierto lo que veo?

Jesús vuelve para continuar con ellos. Es parte de su vida y su misión: encarnarse, pasar haciendo el bien, morir y resucitar. Era novedoso y por tanto daba miedo. La novedad nos trae inseguridad y da miedo si solo nos fiamos de nosotros mismos.

Yo me pregunto constantemente cuando hago revisión de mi vida a la luz de la vida de Jesús si soy capaz de seguir a Jesús en toda su misión. Si soy cristiano he de procurar imitar a Cristo. Es cierto que a veces reflexionamos sobre la encarnación, hacer que en nosotros Cristo se encarne en el mundo de hoy. Lo de pasar haciendo en bien, está por descontado: tenemos el decálogo, los mandamientos de la Iglesia, los consejos evangélicos, las bienaventuranzas, las obras de misericordia, y un largo etcétera que nos ayuda a "pasar haciendo el bien". Encarnar el sacrificio de Cristo en la cruz, participar de su cruz llevando la nuestra es algo que sobre todo la cuaresma nos recuerda y nos ayuda a vivir: intensificamos nuestro ayuno, oración y limosna para sacrificarnos un poco más y unirnos más a la cruz de Jesús. Pero la resurrección? Hay muchos que pasaron haciendo el bien, incluso que murieron por lo que defendían, pero Cristo resucitó. Esa novedad es el anuncio central que da sentido a cualquier otro. Pero es raro? nadie resucita así? Es novedoso y nos da miedo vivir como resucitados porque es extraño en este tener una existencia desbordada por la vida y la Paz.