Es muy difícil de entender para cualquier ciudadano, da igual de un pequeño pueblo o de una gran ciudad que los políticos no traten de entenderse.

Mucho más difícil de entender que los relacionados con la política municipal, que es la más cercana al ciudadano se olviden del diálogo, de la negociación, del compromiso y del respeto.

Es difícil de entender que incluso pretendan sacar rentabilidad política de cualquier asunto municipal, manipulándolo, deformándolo, escondiéndose y mintiendo.

Izquierda Unida ha manifestado en los medios de comunicación y no es la primera vez, que el Alcalde Moraleja del Vino no permite grabar los Plenos, así como suena.

Esto es una deformación de la verdad y se ha dicho que dificulta que los ciudadanos están informados, una manipulación total, incluso han llegado a decir que ha habido agresiones, lo que es totalmente falso, con todo el pleno como testigos.

Incluso cuando no pueden mentir que es su costumbre no dan la carta y se esconden, como en el caso de la bandera que tuvo que venir el Sumo Sacerdote Francisco Molina para desbloquear la situación.

Lo cierto es que cuando se ha suspendido el Pleno y ya van dos veces, siempre ha sido por una cuestión de orden, una cuestión de respeto por tratar de mantener las normas y porque no se puede permitir en un pleno el desacato a la autoridad.

Nunca por tratar de si se graba o no, nunca se ha dicho que no se va a permitir grabar, todo lo que se ha pretendido es tratar el tema en pleno y hacerlo de una manera dialogada entre todos los partidos para establecer un reglamento, unas condiciones, unas normas, no para establecer ningún tipo de censura.

Cuando todo esto se deforma y se manipula perfectamente se podrá calificar de falso y mentiroso a quien lo dice.