Lo que exigen es que la vía rápida portuguesa IC5, que llegará próximamente a la localidad de Duas Igrejas, muy cerca de Miranda do Douro, conecte el tráfico viario de Oporto hacia Zamora a través de Fermoselle o Torregamones. La reivindicación, que me parece justa y razonable, no está, sin embargo, suficientemente explicada a los ciudadanos. Muchos no saben exactamente qué se está pidiendo. He llegado a leer, por ejemplo, que los sayagueses reivindican una nueva autovía. Y no es verdad. Hasta donde yo conozco, lo que desean es aprovechar las nuevas posibilidades de desarrollo que se abren para la zona de la vía rápida que llegará a Duas Igrejas y que, en buena lógica, debe tener continuidad por el territorio zamorano. Ahora bien, ¿por dónde debe continuar la citada vía rápida?

Algunos creen que la salida de la IC5 portuguesa debe hacerse por la localidad de Moveros para conectar con la nacional 122 y, por tanto, con la futura autovía Bragança-Zamora. Esta opción facilitaría la conexión de dos vías de alta capacidad y, en principio, podría tener un impacto muy positivo en el desarrollo de Aliste. Por eso, precisamente, los sayagueses, con muy buen juicio, son conscientes también de que, si la nueva conexión no se realiza por Torregamones o Fermoselle, la zona de los Arribes del Duero puede recibir un golpe casi mortal en términos económicos y demográficos. Yo no creo que las distintas opciones sean excluyentes. Es más, se complementan. Ahora bien, para que el debate, que está en pleno apogeo, avance y no se enquiste, es imprescindible que los Gobiernos central (PSOE) y, sobre todo, regional (PP) se definan cuanto antes. Hasta donde yo sé, de ambas administraciones depende el diseño de lo que unos y otros reclaman con justicia. ¿Hablarán? Lo dudo. A veces los tiempos preelectorales son los menos adecuados para tomar algunas decisiones. Y esta es una.

En cualquier caso, la reivindicación de mejores infraestructuras viarias en la frontera me parece justa y razonable. Buenas carreteras nacionales, regionales y, sobre todo, locales (que tome nota Maíllo) son imprescindibles para el desarrollo de la zona. Y Sayago, como Aliste y Sanabria, se merecen eso y mucho más. En el caso de Aliste, está previsto convertir en autovía la nacional 122. Aunque el ritmo de transformación sea mucho más lento de lo que algunos deseamos, la decisión de ejecutarla no tiene marcha atrás. Y con respecto a Sanabria, aunque la autovía de las Rías Bajas ya absorbe gran parte del tráfico que procede de Oporto a través de Chaves y Verín, la demanda histórica de los sanabreses, que siempre apoyaré, es unir Puebla de Sanabria y Bragança mediante una nueva autovía. Ahora, sin embargo, es el turno de la reivindicación de los sayagueses, que no piden una autovía sino simplemente no repetir errores históricos, como cuando en Portugal el tren llegó hasta Duas Igrejas y no tuvo continuidad en la zona española. Un contrasentido que ahora puede repetirse de nuevo.