El PP está en la calle recogiendo firmas. Me encanta que se pidan firmas en la calle. Alabo el gesto de quienes salen a la calle para solicitar que los ciudadanos estampen su firma para pedir o protestar contra algo. En los papeles del PP el ciudadano debe firmar si "considera conveniente que España siga siendo una única nación en la que todos sus ciudadanos sean iguales en derechos, obligaciones, así como en el acceso a las prestaciones públicas". Yo estoy de acuerdo con esta declaración de principios. Es más, lo dice la Constitución española, que yo voté en su día.

No entiendo, sin embargo, qué relación tiene la pregunta de los populares con el Estatuto de Cataluña. La pregunta es una obviedad. Yo esperaba que se preguntara por el estatuto. Pero no. Simplemente se limita a solicitar a los ciudadanos que estampen su firma en un papel encabezado por un texto que cualquier mortal podría firmar tranquilamente. Lo único que puede hacer que salten chispas es la referencia a "si considera que España siga siendo una única nación". En algunas comunidades, esta frase levantará ampollas. Y por algo será. Pero hasta donde llegan mis informaciones, en el Estatuto de Cataluña no se declara la independencia de aquella comunidad y, por lo tanto, no se rompe España. ¿A qué viene, pues, tanto revuelo?

Es curioso, además, que los populares quieran pasar ahora por ser los adalides y los máximos defensores de la igualdad entre los españoles, vivan donde vivan. Yo estoy plenamente de acuerdo con que sea así. Ahora bien, la igualdad debe reivindicarse no sólo para los ciudadanos que viven en distintas regiones, sino también para los que vivimos dentro de una misma provincia o en el interior de un mismo municipio, pueblo o ciudad. Lo escribía el domingo pasado. Las diferencias, por ejemplo, que existen entre los distintos barrios de la ciudad de Zamora son alarmantes. Me gustaría, por tanto, que los populares salieran a la calle a pedir firmas para que los ciudadanos que viven en Alviar, San Frontis o Cabañales tengan también los mismos derechos, las mismas obligaciones y reciban las mismas prestaciones públicas que los vecinos que residen en el Centro de la ciudad, en la Candelaria o en el barrio de Las Viñas. Y los de Flechas, los mismos derechos que los de Morales del Vino.

Pero también me gustaría que los populares salieran a la calle a pedir firmas para que los trabajadores con contratos precarios tuvieran los mismos derechos, las mismas obligaciones y las mismas prestaciones que los empresarios con asalariados. ¿O acaso unos y otros no son también ciudadanos? Pues hala, si lo son, a pedir firmas en la calle para que la desigualdad social en Zamora desaparezca lo antes posible. Ya tienen una firma comprometida: la mía.