La nueva Ley General de Comunicación Audiovisual ha sido aprobada este miércoles 22 de junio. Tras obtener el visto bueno en el Congreso de los Diputados, la nueva legislatura también ha obtenido el respaldo del Senado. Esta nueva normativa pretende adaptar la legislatura audiovisual español a la normativa europea.

Uno de los puntos que afecta directamente a nuestra televisión es la nueva forma de emitir publicidad. Hasta ahora, las cadenas podían emitir un máximo de 12 minutos de publicidad por hora. Ahora podrán distribuir ese tiempo como quieran. entre las 06:00 de la madrugada y las 18:00 horas, podrán emitir un máximo de 144 minutos donde mejor consideren. Desde las 18:00 horas hasta las 24:00 horas, tendrán otros 72 minutos que podrán distribuir como les venga en gana, sin límite de minutos por hora.

A partir de ahora, todos los contenidos que no sean aptos para menores de 18 años, estarán en la obligación de emitirse entre las diez de la noche y las seis de la madrugada. Además, los canales podrán modificar sus parrillas sin previo aviso. Hasta ahora, todas debían comunicar su programación con tres días de antelación, una obligatoriedad que ahora desaparece y que podría dar pie a numerosas contraprogramaciones por obtener mejores audiencias.

En otro ámbito, las televisiones estarán obligadas a dedicar el 51% de sus emisiones a obras europeas y al menos el 10% de las horas de emisión deberá dedicarse a obras europeas de productoras independientes. En las televisiones de pago tendrán la obligación de destinar el 30% de su catálogo a obras europeas. La medida más polémica es la que iguala a los grandes grupos mediáticos con pequeñas productoras, a pesar de que su situación es muy diferente y las diferencias que ello podría generar.

Tampoco se libran de esta reforma las plataformas. Con la nueva Ley, las empresas de streaming tendrán que aportar el 0,9% de sus ingresos a RTVE. Esto es algo que ya hacían las televisiones en abierto y las televisiones de pago, a las que ahora se les suman los prestadores de vídeo bajo demandas y las plataformas de intercambio de vídeos. El objetivo de esta aportación es que la pública siga sin emitir publicidad.