Secret Story es una de las apuestas más ambiciosas de Telecinco de cara a la próxima temporada. El reality, que tiene una trama más compleja que los anteriores formatos emitidos por la cadena y tuvo mucho éxito a nivel internacional, incorpora en España una modificación inédita con la que promete ser más competitivo que en otros países: sus concursantes son famosos.

Los rostros conocidos que prometen revolucionar la pequeña pantalla en los próximos meses son Lucía Pariente, José Antonio Canales Rivera, Luca Onestini, Bigote Arrocet, Luis Rollán, Sofía Cristo, Julen, Sandra Pica, Fiama, Gemeliers, Emmy Russ, Chimo Bayo, Cynthia Martínez, Isabel Rábago, Miguel Frigenti y Cristina Porta.

El programa de televisión se estrenó el pasado jueves 9 con una cuota de pantalla aceptable al conseguir posicionarse como líder de su franja horaria. Los primeros programas, mientras se emiten las primeras pruebas y escenas de convivencia de los protagonistas, se repiten una y otra vez las dinámicas del programa, totalmente novedosas y desconocidas para la audiencia española.

Los encargados de dejarlas claras son sus presentadores: Jorge Javier Vázquez, Jordi González, Lara Álvarez y Carlos Sobera, los mismos rostros que conducen el concurso de telerrealidad más exitoso de la televisión en España: Supervivientes.

El catalán se hace cargo de un especial que se emite los domingos al que bautizaron como "La noche de los secretos".

Jordi González muestra su peor cara en Secret Story

Los espectadores mostraron su descontento con tuits y montajes sobre el presentador TWITTER

La actitud del presentador ha disgustado a los espectadores, que han dejado constancia a través de sus redes sociales. La primera muestra de desinterés se produjo cuando entró a plató sin presentar a los colaboradores del programa.

Jordi González presentaba la gala, aparentemente, sin energía ni entusiasmo por su nuevo proyecto profesional. En otra ocasión, cuando tenía que presentar una prueba, se confundió y salió del paso protestando y exculpándose. La gota que colmó llegó cuando tuvo que entrar en directo a la casa para dar una serie de instrucciones a los concursantes, a quienes pilló desprevenidos y hablando entre ellos. El presentador no pudo disimular su malestar y les espetó: "Que os calléis, coño".

Los espectadores criticaron su actitud a través de Twitter donde, además de expresar su incredulidad ante la conducta de González pidieron su sustitución por Frank Blanco, uno de los nuevos tertulianos de Mediaset.

No es el primera episodio de este tipo que vive el catalán, su desinterés se hizo patente en Supervivientes 2020 y tuvo tanto calado que no acabó de presentar el concurso.