1/2 ternasco de Aragón con Denominación Específica
2 cebollas de Fuentes de Ebro
250 gr. de ciruelas secas
150 gr. de setas de otoño (muchardinas)
1 taza grande de vino moscatel
1 taza grande de vino blanco seco
1 hoja de laurel
harina, maicena
aceite de oliva virgen extra del Bajo Aragón
sal
Elaboración
Se pone a macerar la ciruela con el vino moscatel.
Con las puntas y el cuello del ternasco se hace un caldo.
El resto de la carne se parte en trozos pequeños, se enharinan y se saltean con un poco de aceite de oliva.
En una cazuela se sofríe la cebolla cortada fina y cuando se ha dorado se añade el cordero y el vino blanco, dejando que éste reduzca. Después, se agrega el caldo suficiente para cubrir la carne y se deja cocer a fuego mediano durante 40 minutos.
Pasado ese tiempo se baja el fuego, se agregan las muchardinas y las ciruelas, que las habremos sacado del adobo para reducir el moscatel al fuego.
Cuando la carne esté tierna se incorpora la maicena desleída en un poco de caldo que habrá sobrado y se deja unos minutos más. Dejar reposar dos horas y luego calentar de nuevo.